AROMATERAPIA
El cuidado de las cutículas.
El cuidado de las cutículas.
Esta receta nos ayudará a reparar y curar las cutículas dañadas.
Ingredientes
60 ml. de aceite de oliva virgen.
5 gotas de aceite esencial de lavanda.
2 gotas de aceite esencial de limón.
Elaboración
Calentamos en un bol de cerámica o de vidrio un poquito de aceite de oliva y lo calentamos , después añadiremos los aceites esenciales y lo removeremos bien.
Remojaremos las uñas y cutículas unos 10 minutos en el preparado. Si sobra un poco de preparado lo guardamos en un lugar fresco. Se recomienda hacerlo por lo menos 1 vez a la semana .
Pilar Moreno - Consultora Titulada en Feng Shui, Radiestesia, Radionica, y Terapeuta en Medicina Natural ( localización de Geopatias, Limpiezas Energéticas de espacios, Flores de Bach, Aromaterapia, Gemoterapia, , Péndulos y varillas , tratamientos para personas y animales )
ESTUDIOS E INFORMES DE PROSPERIDAD, ARMONÍA Y SALUD . PRESENCIALES Y SOBRE PLANOS.
Piernas cansadas
Las mujeres sufren especialmente de piernas cansadas, en especial las mujeres. Este preparado puede hacerse todo el año para las personas que padezcan de este problema
Las mujeres sufren especialmente de piernas cansadas, en especial las mujeres. Este preparado puede hacerse todo el año para las personas que padezcan de este problema
Esta la receta es muy refrescante .
Ingredientes
En 100 ml de Aceite base: podéis usar Aceite de Oliva virgen, Aceite de Almendras y Germen de Trigo.
Si hay edema, mejor usar aceite de avellana.
Elaboración
En el recipiente echaremos las siguientes esencias:
30 gotas de Ciprés.
10 gotas de Geranio.
20 gotas de Romero.
10 gotas de Lavanda.
5 gotas de Menta.
Pilar Moreno - Consultora Titulada en Feng Shui, Radiestesia, Radionica, y Terapeuta en Medicina Natural ( localización de Geopatias, Limpiezas Energéticas de espacios, Flores de Bach, Aromaterapia, Gemoterapia, , Péndulos y varillas , tratamientos para personas y animales )
ESTUDIOS E INFORMES DE PROSPERIDAD, ARMONÍA Y SALUD . PRESENCIALES Y SOBRE PLANOS.
DOLORES MENSTRUALES
Por lo general la dismenorrea suele venir acompañada con reglas irregulares, metrorragias, etc. que también deberíamos tratar para mejorar nuestra salud.
Esta receta de aromaterapia nos servirá para elaborar un aceite de masaje. Dicho preparado podremos usarlo unos días antes de que comience el dolor y en el momento de la menstruación.
Ingredientes
50 ml. de aceite base (podremos usar aceite de onagra, de borraja, oliva, almendras..)
Aceite esencial de Sándalo; 2 gotas.
Aceite esencial de Albahaca; 4 gotas.
Aceite esencial de Mejorana; 4 gotas.
Aceite esencial de Romero; 6 gotas.
Aceite esencial de Cayeput; 3 gotas.
Elaboración
Con el preparado realizaremos masaje en la zona lumbar y abdominal. Podremos aplicárnoslo cuatro o cinco días antes de la regla.
También lo podremos usar en baños aromáticos; echaremos 2 cucharadas del preparado en el agua de la bañera.
La reflexologia podal es una terapia natural muy eficaz en estos casos . Hay que realizar un masaje en la zona externa del pie ( señalada de color rojo ) , presionando ligeramente , pues se trata de zonas dolorosas .
Pilar Moreno - Consultora Titulada en Feng Shui, Radiestesia, Radionica, y Terapeuta en Medicina Natural ( localización de Geopatias, Limpiezas Energéticas de espacios, Flores de Bach, Aromaterapia, Gemoterapia, , Péndulos y varillas , tratamientos para personas y animales )
ESTUDIOS E INFORMES DE PROSPERIDAD, ARMONÍA Y SALUD . PRESENCIALES Y SOBRE PLANOS.
Psoriasis, dermatitis y piel sensible.
Ingredientes
Recomendado para todos los días , mejor después de un buen baño o ducha.
Se necesitaran echar 25 ml de Aceite de Almendras, 25 ml Aceite Germen de Trigo y 25 ml de Aceite de Oliva virgen extra.
Añadir los siguientes aceites esenciales
Árbol de té; 3 gotas.
Romero; 1 gota.
Manzanilla; 4 gotas.
Cedro o Sándalo; 1 gota.
Caléndula o Rosa Mosqueta; 2 ó 3 gotas.
Pilar Moreno - Consultora Titulada en Feng Shui, Radiestesia, Radionica, y Terapeuta en Medicina Natural ( localización de Geopatias, Limpiezas Energéticas de espacios, Flores de Bach, Aromaterapia, Gemoterapia, , Péndulos y varillas , tratamientos para personas y animales )
ESTUDIOS E INFORMES DE PROSPERIDAD, ARMONÍA Y SALUD . PRESENCIALES Y SOBRE PLANOS.
Visita las webs: www.institutogenshai.blogspot.com, www.fengshuioccidente.com
y www.actiweb.es/terapiasyenergia
y www.actiweb.es/terapiasyenergia
FITOTERAPIA
PLANTAS QUE CURAN
PLANTAS PROHIBIDAS
Admiro profundamente a Josep
Pilar Moreno - Consultora Titulada en Feng Shui, Radiestesia, Radionica, y Terapeuta en Medicina Natural ( localización de Geopatias, Limpiezas Energéticas de espacios, Flores de Bach, Aromaterapia, Gemoterapia, , Péndulos y varillas , tratamientos para personas y animales )
ESTUDIOS E INFORMES DE PROSPERIDAD, ARMONÍA Y SALUD . PRESENCIALES Y SOBRE PLANOS.
Visita las webs: www.institutogenshai.blogspot.com, www.fengshuioccidente.com
y www.actiweb.es/terapiasyenergia
y www.actiweb.es/terapiasyenergia
RECOMENDACIONES PARA PERSONAS CON CÁNCER
Admiro profundamente la labor del Sr. Josep Pamies. Y por esa razón quiero ayudarle a divulgar,
sus maravillosos conocimientos sobre todas las plantas , para que muchas personas que han perdido su salud y lo que es peor , toda esperanza de curación , sepan que la naturaleza nos ofrece un extenso abanico de posibilidades para que vuelvan a recuperar su equilibrio y bienestar .
Pilar Moreno - Consultora Titulada en Feng Shui, Radiestesia, Radionica, y Terapeuta en Medicina Natural ( localización de Geopatias, Limpiezas Energéticas de espacios, Flores de Bach, Aromaterapia, Gemoterapia, , Péndulos y varillas , tratamientos para personas y animales )
ESTUDIOS E INFORMES DE PROSPERIDAD, ARMONÍA Y SALUD . PRESENCIALES Y SOBRE PLANOS.
Visita las webs: www.institutogenshai.blogspot.com, www.fengshuioccidente.com
y www.actiweb.es/terapiasyenergia
y www.actiweb.es/terapiasyenergia
**********************************************************************
Salud de la botica del Señor
de Maria Treben
Prólogo
A pesar de los muchos ataques recibidos desde los más diversos lugares contra mi persona y mis consejos en el folleto »Salud de la botica del Señor«, la gran cantidad de cartas entusiásticas que me han enviado sanos y enfermos, médicos y versados en medicina, del país y del extranjero, me han inducido a seguir poniendo al alcance de todos mis conocimientos y experiencias más recientes acerca de las plantas medicinales en una nueva edición mejorada y ampliada del mencionado folleto.
En una época, en que gran parte de la humanidad se va apartando considerablemente de un modo de vida natural y va dejando por una concepción falsa de la vida camino abierto a enfermedades amenazantes, deberíamos acordarnos de las hierbas medicinales que Nuestro Señor por su bondad nos está regalando desde tiempos remotos. El Padre Kneipp dice en sus escritos que »para cada enfermedad ha crecido una hierbecilla.«
Siendo así, cada uno puede favorecer a su salud recolectando a su debido tiempo plantas y hierbas de la «farmacia de Dios,« bebiendo diariamente o durante un período determinado infusiones o utilizando los extractos para fricciones y compresas, cataplasmas de vapor o baños de hierbas. Una vez uno se haya decidido a utilizar las hierbas medicinales tendría que empezar con las hierbas purificantes de la sangre, como Ajo de oso, Ortiga, Verónica, Diente de león y Llantén. Estos tratamientos no pueden perjudicar nunca si se siguen exactamente mis indicaciones. Si no aportan el alivio esperado, puede ser debido a que existan zonas geopáticas en el entorno del enfermo (vivienda, puesto de trabajo). En este caso habría que consultar con un zahorí (buscador de manantiales) para que localizara lugares libres de radiaciones.
En casos serios de malestar, fiebre u otros síntomas de enfermedad manifiestos, es imprescindible consultar a tiempo al médico para que diagnostique. Igualmente es preciso dejar controlar por un médico concienzudamente el proceso de desarrollo y de curación de una enfermedad grave.
El hecho de que la medicina oficial vaya prestando cada vez más atención a la medicina natural se ha demostrado claramente en el 25 Congreso Internacional de Postgraduados de la Deutsche BundesÁrztekammer y Osterreichische Árztekammer (Colegios médicos alemán y austríaco) que tuvo lugar en Badgastein (Salzburg) y en el que participaron 1500 médicos.
El Prof. Dr. Carl Alken (Universidad de Saarland, R.F.A.) justifica ese incremento de, atención hacia las virtudes curativas de la naturaleza con las siguientes palabras:
«Después de la segunda guerra mundial, los médicos se encontraron prácticamente incapacitados para combatir por ejemplo la tuberculosis o la parálisis renal. Luego vino el gran cambio con la introducción de los antibióticos. Los resultados son evidentes, hoy ya tenemos que luchar contra las consecuencias negativas de la administración excesiva de los mismos y contra la mala utilización de esa »bendición«. A ello hay que añadir la avalancha imparable actual de enfermedades por hongos (micosis), que se deben a trastornos del equilibrio biológico, al exceso de medicamentos o a otras influencias del medio ambiente.«
Desde hace años voy frecuentando sesiones y congresos, cuyos resultados también se publican en los periódicos. Muchos médicos conscientes de su responsabilidad previenen contra el peligro del abuso de medicamentos. Sobre todo no dejan de advertir lo peligrosos que pueden ser los analgésicos. Gran cantidad de gente los toma sin ningún control médico, lo que causa a veces lesiones gravísimas de los órganos. Por ejemplo, los medicamentos para bajar la tensión arterial, tomados durante cierto tiempo, favorecen en las mujeres la formación de cáncer de mama, hecho que han demostrado los resultados de tres grupos de investigadores experimentando independientemente en Boston, Bristol y Helsinki. Mi propósito es poner al alcance de la mano de los enfermos el conocimiento de las propiedades curativas de una serie de plantas importantes y además hablarles de las experiencias de los últimos dos años y medio, es decir desde la publicación del folleto »Salud de la botica del Señor«.
Para el ser humano es muy edificante el encontrar una salida a su desesperación y padecimiento valiéndose de su propio esfuerzo y su propia voluntad, gracias a la ayuda maravillosa de nuestras hierbas medicinales. El enfermo que se empeñe en reconquistar su salud asumiendo él mismo esta responsabilidad, ha elevado de tal manera su dignidad humana, que se encuentra en el camino que le puede sacar de ese callejón sin salida cual es su enfermedad.
Siempre me preguntan de dónde saco mis conocimientos sobre las plantas medicinales, pero no puedo dar una contestación precisa. Siendo niña solía pasar las vacaciones de colegio en casa de la familia de un guarda forestal. Allí aprendí precozmente a conocer y a apreciar la naturaleza en su conjunto. De niña ya sabía distingiur las plantas y conocía sus nombres; sin embargo ignoraba su importancia como plantas curativas. Mi madre, entusiasta de los métodos naturales de Kneipp, procuraba criarnos de una manera natural, sin influencias químicas.
Siendo jovencita tuve dos experiencias que fueron muy decisivas para mi vida. Una viuda de unos 40 años, madre de tres hijos, estaba enferma de leucemia y después de una estancia en el hospital la mandaron a su casa como incurable. Los médicos le pronosticaron solamente tres días de vida. Su hermana, preocupada por los niños, fue con la orina de la enferma a consultar con una herbolaria que vivía cerca de Karlsbad. La mujer dijo asustada: »¡ Tan tarde viene usted con esa agua de muerto!« No obstante, las hierbas que le dio ayudaron a la enferma. Según un nuevo reconocimiento en el hospital 10 días después, la leucemia había desaparecido por completo.
Un caso parecido se dio al mismo tiempo con una mujer de 38 años, madre de cuatro hijos. Aquí también se trataba de leucemia y según los médicos no había esperanza. La mujer pidió igualmente consejos a una herbolaria, la cual le dio unas hierbas. Se preparaba cada día varios jarros de tisana. Cada vez que pasaba por donde estaban se bebía un buen trago y pensaba: »Si bien no me ayudan, no me harán ningún daño.« El resultado del nuevo reconocimiento después de diez días: Totalmente libre de la leucemia.
Estos ejemplos demuestran lo importante que es beber distribuido durante el día grandes cantidades de tisana cuando se trata de enfermedades que parecen ser incurables. A raíz de estos hechos me convencí de que las hierbas podían aportar ayuda incluso en casos de enfermedades malignas.
El día de la Candelaria de 1961 murió mi buena madre. Entonces recibí el empuje para dedicarme a la ciencia de las plantas medicinales. Iba haciendo nuevas experiencias y poco a poco me familiaricé del todo con las hierbas de la farmacia del Señor. Era como si me condujera una fuerza sobrenatural, como si la madre de Dios, amparo de los enfermos, me enseñara el camino seguro. Por la confianza que le tengo, siempre me ha ayudado mucho personalmente, en casos de duda, la oración ante una imagen de la Virgen que tengo en casa.
Así que no sólo quiero llamar la atención sobre las plantas medicinales, sino también sobre la omnipotencia del Creador, en cuyas manos está nuestra vida, que El guía. En El buscamos ayuda y consuelo en los casos de graves enfermedades y recogemos piadosamente las hierbas de Su farmacia. Finalmente quisiera subrayar que he intentado lo mejor posible incorporar en esta edición refundida todas mis experiencias, para ofrecerlas a la humanidad con el fin de que tengan provecho. Igualmente quiero añadir a esta edición una petición: ¡No me llamen por teléfono ni me manden cartas! Como no soy curandera, tampoco paso consultas. El índice de materias bien detallado le indicará la manera exacta para aplicar las hierbas adecuadas. También quisiera llamar la atención sobre el folleto »Maria Treben's Heilerfolge« (Los éxitos curativos de Maria Treben; cartas e informes sobre éxitos curativos) que ha publicado la misma editorial.
Y otra cosa más: Yo no hago envíos ni recojo encargos de hierbas.
Grieskirchen, en mayo 1980
MARIA TREBEN
GENERALIDADES
Correcta recolección, conservación y preparación de las hierbas
medicinales:
medicinales:
RECOLECCIÓN
El conocimiento preciso de las plantas medicinales es primordial para su recolección. Una vez lo tengamos, hay que saber cuándo, dónde y de qué manera se recolectan las hierbas. La experiencia ha demostrado que los mejores resultados de curación se han conseguido con hierbas recién cogidas, las cuales son imprescindibles para obtener un éxito en caso de enfermedades graves. Hierbas frescas puede recolectar uno mismo desde principios de la primavera, a veces ya a finales de febrero, hasta entrado noviembre. Algunas incluso se pueden encontrar en invierno debajo de la capa de nieve (p. ej. la Celidonia), con tal de que uno se acuerde del lugar donde crecen.
Para el invierno se prepara una reserva no muy grande de hierbas secas, las cuales se recolectan en el momento de su mayor contenido en sustancia activa:
Para la FLOR es al principio de la floración.
Para las HOJAS antes y durante la floración.
Las RAICES se desentierran a principios de la primavera o en otoño. Las FRUTAS
se recogen en la época de su maduración.
se recogen en la época de su maduración.
Además téngase en cuenta las siguientes reglas:
¡Sólo se cogen plantas sanas, limpias y sin insectos!
Las hierbas se recolectan los días de sol, sin estar húmedas y cuando el rocío se haya evaporado. Para la recolección hay que evitar campos y praderas abonados quí micamente, riberas de aguas sucias y contaminadas, terraplenes ferroviarios y la proximidad de carreteras frecuentadas, autopistas e instalaciones industriales.
¡Cuida bien la naturaleza! ¡ No arranques las plantas con todas las raíces, no hagas ningún daño! Algunas plantas están bajo protección. Hay muchas otras plantas medicinales con las mismas sustancias activas que no están protegidas. (p. ej. Oreja de oso, protegida — Primavera, no protegida). Al cogerlas no hay que aplastar las flores y hojas ni meterlas en bolsas de plástico, porque entonces las hierbas empiezan a sudar y más tarde al desecarlas se vuelven negras.
DESECACIÓN
Las hierbas no se lavan para desecarlas. Se cortan a pedacitos y se extienden lo más posible sobre tela o papel sin estampar y se dejan secar lo más rápidamente posible a la sombra o en piezas cálidas y aireadas (desvanes). Raíces, cortezas o partes de plantas muy jugosas requieren con frecuencia una desecación con calor artificial. En estos casos la temperatura no debe sobrepasar los 35° C. Las raíces (lavadas cuidadosamente), el Muérdago y el Epilobio se secan mejor si se cortan antes. Las hierbas que se guarden para el invierno tienen que estar completamente secas. Se conservan perfectamente en recipientes de cristal o cajas de cartón. ¡No emplee recipientes de plástico o de hojalata! Es recomendable guardarlas al abrigo de la luz. (Use cristales de color; los verdes son los mejores).
j Renueve las provisiones cada año !
Con el tiempo las hierbas pierden sus virtudes curativas. Cada primavera nos da su nueva riqueza de hierbas.
MODOS DE PREPARACIÓN
Infusión - Cocimiento: Las hierbas frescas se cortan en pedacitos y se meten en las cantidades prescritas en un jarro de cristal u otro recipiente que no sea de metal. Se pone agua a hervir, se retira y se echa sobre las hierbas preparadas. Las hierbas frescas se dejan poco tiempo en infusión (medio minuto basta). La bebida debe ser de color claro: amarillo claro o verde claro. Las hierbas secas se dejan un poco más de tiempo en infusión (de uno a dos minutos). Una tisana preparada de este modo es mucho más favorable para la salud y el paladar, y además tiene buen aspecto. Las raíces se ponen al fuego con agua fría según la cantidad prescrita, se le da un hervor y se deja reposar tres minutos. Se echa en un termo la cantidad diaria establecida y se va bebiendo a sorbos, según las indicaciones, a lo largo del día. En general se toma una cucharadita bien llena de hierbas por 1/4de litro de agua (= 1 taza), salvo las indicaciones especiales para ciertas plantas.
Maceración: Algunas hierbas (p. ej. la Malva, el Muérdago y el Cálamo aromático) no deben de escaldarse, ya que por el calor perderían sus virtudes curativas. El extracto de estas hierbas se obtiene en frío. Se deja macerar la cantidad indicada para las diversas plantas en agua fría, de 8 hasta 12 horas (preferentemente durante la noche), después se calienta ligeramente (temperatura para beber) y se guarda la cantidad necesaria para un día en un termo previamente enjuagado con agua caliente. La mezcla de la maceración y la infusión se considera como la mejor manera de aprovechar las plantas medicinales: Ponga las hierbas con la mitad del agua indicada durante la noche en remojo, cuele el líquido al día siguiente por la mañana. Escalde las hierbas que han quedado en el tamiz con la segunda mitad de la cantidad del agua indicada y cuélela nuevamente. Ahora se mezclan los dos líquidos, uno obtenido por maceración y el otro por infusión. De esta manera se extraen de las hierbas los agentes activos que sólo se disuelven o en frío o en caliente.
TINTURA (ESENCIA)
Las tinturas son extractos que se obtienen por maceración en alcohol (o un buen aguardiente) de 30 -40 °. Se llena una botella u otro recipiente por el estilo hasta el gollete, con las hierbas, sin apretarlas, y se echa encima el aguardiente. Después de cerrarlo bien se deja durante 15 días o más en un lugar cálido sacudiéndolo de vez en cuando. Finalmente se cuela el alcohol exprimiendo bien el residuo. Las tinturas se toman por vía interna a gotas diluidas en té; en uso externo se emplean en compresas y unturas.
JUGO FRESCO
Los jugos de hierbas frescos sirven para uso interno, tomándolos a gotas; para uso externo se aplican con ayuda de un tapón de algodón a las partes enfermas del cuerpo. Estos jugos se obtienen mediante una licuadora que tritura y exprime las plantas al mismo tiempo. Hay que procurar hacer estos jugos cada día con hierbas frescas. En botellas pequeñas bien cerradas pueden durar unos meses si se guardan en la nevera.
CATAPLASMAS DE PLANTAS FRESCAS
Sobre una tabla de madera o en un mortero se machacan los tallos y las hojas de la planta hasta que quede todo a modo de una masa. Esta se extiende sobre un trozo de tela y se aplica a la parte enferma del cuerpo cubriéndolo después todo con un paño y vendándolo para mantenerlo caliente. Esta cataplasma se puede dejar actuar toda la noche.
CATAPLASMAS DE HIERBAS AL VAPOR
Tomamos una olla con agua hirviendo y colocamos sobre la misma un colador grande, tamiz o escurridor con las hierbas frescas o desecadas de forma que éstas no toquen el agua. A continuación se tapa la olla y se mantiene en el fuego para que el vapor reblandezca las hierbas. Después de un rato se envuelven las hierbas ya blandas y calientes en una gasa y se aplican a la parte enferma del cuerpo. Se cubre todo con un paño de lana y se ata con otros paños. Hay que procurar que el enfermo no tenga la sensación de frío. Muy eficaces son estas cataplasmas hechas con Cola de caballo. Las cataplasmas al vapor se dejan actuar durante dos horas o toda la noche.
PREPARACION DE POMADAS Y ACEITES
Se trituran cuatro puñados de hierbas. 500 gramos de manteca de cerdo se calientan como para freír carne. En esta grasa caliente se echan las hierbas y se remueve todo bien. Después de haberlas frito brevemente se remueve todo otra vez, se retira la sartén del fuego, se tapa y se deja enfriar del todo durante la noche. Al día siguiente se calienta ligeramente, se cuela a través de un lienzo y se vierte la pomada antes de que se enfríe en vasijas de cristal o de porcelana.
El aceite se prepara de la siguiente manera: En una botella se meten las flores o hierbas sin apretar hasta que lleguen al gollete, se llena con aceite de oliva virgen de modo que éste sobrepase en dos dedos el nivel de las hierbas. La botella debe estar 15 días al sol o cerca de otra fuente de calor.
BAÑOS DE HIERBAS
Baño de cuerpo: Las hierbas indicadas se dejan durante la noche en agua fría a remojo. Para un baño se necesita un cubo lleno (6-8 litros) de hierbas frescas ó 200 gramos de hierbas desecadas. Al día siguiente se calienta todo y después de colarlo se añade el extracto al agua del baño. La duración del baño es de 20 minutos. El corazón tiene que estar fuera del agua. Después del baño no hay que secarse sino envolverse en una toalla grande o una bata y sudar en la cama una hora.
Baño de asiento: Para el baño de asiento se toma solamente medio cubo de hierbas frescas o unos 100 gramos de hierbas desecadas y se procede de la misma manera que para el baño de cuerpo. El agua del baño debe cubrir los riñones. ¡ Siga las indicaciones dadas para cada planta !
Tanto el agua del baño de cuerpo como la del de asiento se puede utilizar todavía dos veces si se vuelve a calentar.
COMPRESAS DE HIERBAS SUECAS
Según la parte del cuerpo que haya que tratar, se toma un pedazo de algodón o de celulosa más o menos grande, se moja con gotas de Hierbas Suecas y se aplica a las partes enfermas. Es imprescindible untar previamente las partes afectadas con manteca de cerdo o pomada de Maravilla, para que el alcohol de las Hierbas Suecas no seque la piel. Sobre esta compresa se puede poner un plástico para no manchar la ropa. Después se cubre con un paño de lana y, si conviene, se venda. Según la enfermedad se deja actuar la compresa de dos a cuatro horas. Si el paciente lo soporta, puede dejarse toda la noche. Después del tratamiento se empolva la piel. Si aparecieran, en personas con piel sensible, irritaciones, se abrevia el tiempo de aplicación o se interrumpe la cura por un cierto período. En caso de alergias se suprime el plástico y sólo se pone el paño. No hay que olvidarse de untar la piel antes de aplicar la compresa. Si se manifestara picor unte la piel con pomada de Maravilla.
Estas compresas no obligan a quedarse en la cama; si están bien vendadas puede uno moverse tranquilamente en casa o estar sentado.
Apuntes del libro: Salud de la Botica del Señor de Maria Treben de Editorial Ennsthalec
AGRIMONIA (Agrimonia eupatoria)
Esta excelente planta se llama también Hierba de San Guillermo, Té de los bosques, Hierba de las heridas, Hierba bacera y Hierba del podador. Se cría en los setos y ribazos, en los bordes de los caminos, a orillas de los cultivos, en los matorrales espesos y en las ruinas. Las pequeñas flores amarillas, forman parecido al Gordolobo, una espiga larga. Toda la planta está cubierta de un vello suave. Las hojas se dividen en segmentos desiguales, de los cuales los grandes alcanzan una logitud de 10 cms. La Agrimonia llega a 80 cms. de altura y pertenece a la misma familia que el Pie de león. Se recolecta de mayo en adelante en plena floración. El uso de esta hierba medicinal, como el de muchas otras, se remonta a tiempos lejanos. Los antiguos egipcios ya la conocían.
La Agrimonia es un remedio muy indicado para curar toda clase de inflamaciones de la garganta, de la boca y de la faringe. Se recomienda en casos de anginas, afecciones de la gargante, estomatitis ulcerosa e inflamaciones de la mucosa bucal. Las personas que debido a su profesión están obligadas a hablar mucho o a cantar, deberían hacer preventivamente cada día gárgaras con una infusión de Agrimonia.
Las hojas actúan eficazmente contra la anemia y las heridas, así como contra el reuma, el lumbago las indigestiones, el hígado duro, la congestión del hígado y las enfermedades del bazo. De la infusión se pueden beber dos tazas al día.
Cada persona debería molestarse en prepararse una o dos veces al año un baño de cuerpo de Agrimonia (véase en »Modos de preparación«). Los niños escrofulosos deberían de tomarlo cada día.
La Agrimonia constituye por sus virtudes astringentes y sus principios activos curativos una de nuestras mejores plantas medicinales. El doctor Schierbaum dice: »Tres veces al día una taza de infusión, cura las dilataciones del corazón, del estómago y del intestino; tomándola durante algún tiempo, cura incluso las afecciones de los riñones y de la vejiga.«
Contra las varices y las úlceras crurales se recomienda la pomada de Agrimonia (véase en »Modos de preparación«); es muy eficaz y tiene casi el mismo uso que la pomada de Maravilla.
Para combatir las enfermedades del hígado se utiliza una tisana compuesta de Agrimonia, Galio y Aspérula olorosa. Se toma cada día una taza en ayunas y dos distribuidas durante el día, a sorbos espaciados.
MODOS DE PREPARACION
Infusión: Una cucharadita de Agrimonia por cada 1/4 I. de agua. Se echa el agua hirviendo sobre las hierbas y se deja reposar brevemente.
Baño de cuerpo: 200 g. de hierba por baño (véase en Generalidades »Baños de cuerpo«).
Tisana compuesta (para el hígado): Se mezclan 100 g. de Agrimonia, 100 g. de Galio y 100 g. de Aspérula olorosa; con una cucharadita de la mezcla y 1/4 I. de agua se prepara una infusión.
Pomada: Dos puñados de hojas, flores y tallos triturados por cada 250 g. de manteca de cerdo (véase en Generalidades »Preparación de pomadas y aceites«).
AJO DE OSO (mium ursinum)
Cada primavera nace la esperanza de los días de sol y de calor. Nos sentimos animados y de buen humor, nos alegramos del primer verde y del júbilo de los pájaros y con el corazón abierto percibimos en estos regalos la bondad del Creador. En vista de este rejuvenecer de la naturaleza tendríamos que decidirnos a someternos a una cura primaveral depuradora, cuyo efecto refrescante para nuestra salud no hay que tener a menos.
El Ajo de oso es uno de los primeros anunciadores de la primavera. Las hojas lanceoladas, brillantes y de un verde llamativo, parecidas a las del Lirio de los valles, brotan de un bulbo alargado cubierto de unas membranas blancas transparentes. El bohordo liso y verdeclaro con las flores blancas agrupadas en forma de una bola alcanza unos 30 cm. de altura. Esta planta sólo se cría en los prados húmedos, ricos en mantillo, en las vegas sombreadas y húmedas y en los bosques de los Alpes, debajo de los arbustos. Su fuerte olor a ajo nos revela la planta antes de percibirla con la vista. Por este olor característico es imposible confundir las hojas con las del Lirio de los valles o del venenoso Cólquico.
Al principio de la primavera en muchos bosques alpinos se ven por todas partes las hojas frescas y verdes del Ajo de oso. Empiezan a salir en abril o mayo y a veces antes. La floración es en mayo o junio. Poderosas virtudes curativas se ocultan en esta hierba medicinal y se cuenta que los osos, después de su sueño hibernal también la buscan para limpiarse el estómago, los intestinos y la sangre.
En general se puede decir que el Ajo de oso tiene las mismas propiedades que nuestro ajo común, sólo que aquél es mucho más eficaz. Por eso es muy indicado para las curas primaverales depuradoras y para mejorar las enfermedades crónicas de la piel.
Como el secado disminuye considerablemente las virtudes medicinales de las hojas, hay que utilizarlas frescas para las curas de purificación. Cortadas a pedacitos se pueden comer con pan y mantequilla o se utilizan bien trituradas como condimiento, sin hervirlas, para enriquecer las sopas, patatas u otras comidas, donde normalmente se echa perejil y otras hierbas finas. También se pueden consumir en forma de ensalada o hervidas. En este último caso se mezclan con hojas de Ortiga para suavizar el gusto fuerte que tienen cuando se preparan en grandes cantidades.
En abril y mayo, es decir antes de que salga la flor se recolectan las hojas jóvenes; los bulbos se desentierran a fines de verano o en otoño. Estos se pueden utilizar al igual que el ajo común.
Para las personas delicadas del estómago recomiendo el siguiete uso: picar las hojas y el bulbo, cubrirlo todo de leche tibia y después de dejarlo en maceración una o dos horas se bebe el líquido a sorbos. — Para poder gozar todo el año de las virtudes del Ajo de oso, se prepara en casa una tintura (véase en Modos de preparación). De ésta se toman cada día 10 ó 15 gotas diluidas en un poco de agua, lo que constituye un buen remedio para fortalezer la memoria, prevenir la arteriosclerosis y curar muchos otros males.
El Ajo de oso actúa favorablemente sobre el estómago y los intestinos. Combate tanto las diarreas agudas y crónicas, aunque vayan acompañadas de gases y cólicos, como el estreñimiento, lo mismo que se deba a un espasmo interno como a la relajación de los intestinos. Los gusanos, incluso las ascárides se expelen después de ingerir durante una cierta temporada Ajo de oso. Una vez equilibrado el sistema digestivo, desaparecen también aquellas molestias que suelen hacer sufrir a muchas personas ancianas o a gente muy comedora, por relajación o hartura de los intestinos. También ayuda a curar los trastornos cardiacos o el insomnino, causados por el estómago, así como las molestias debidas a la arteriosclerosis o a la tensión alta de la sangre, como mareo, presión en la cabeza y ansiedad. La tensión de la sangre se normaliza lentamente.
El vino de Ajo de oso (véase en Modos de preparación) es un remedio maravilloso para los ancianos que sufren de catarro bronquial crónico y, en consecuencia, de dificultades respiratorias. Incluso en casos de tos antigua facilita la expectoración y elimina la disnea. Asímismo recomiendo este vino para combatir la tisis pulmonar y la hidropesía, de las cuales padecen con frecuencia las personas de edad. Las hojas recién cogidas limpian también los riñones y la vejiga y tienen un efecto diurético. Heridas de mala curación se cicatrizan rápidamente untándolas con jugo fresco de Ajo de oso. Las afecciones de los vasos coronarios también se mejoran
El Ajo de oso es uno de los mejores purificantes de la sangre, por lo que es muy eficaz para combatir las impurezas crónicas de la piel. El herborista y médico naturista suizo, el padre Künzle, no se cansa de elogiar esta planta: »Limpia todo el organismo, elimina las sustancias tóxicas y los residuos impuros y malos, renueva la sangre, destruye y expulsa las sustancias tóxicas. Las personas eternamente enfermizas, los afectos de líquenes y granos, los pálidos, escrofulosos o reumáticos deberían apreciar el Ajo de oso como si fuera oro. Ninguna hierba del mundo es tan eficaz para depurar el estómago, los intestinos y la sangre. Los jóvenes florecerían como las rosas en el jardín y se desarollarían como una piña al sol.« — Künzle prosigue diciendo que conoce a familias enteras que antes de consumir el Ajo de oso »estaban todos enfermizos, pendientes del médico, llenos de erupciones y líquenes y tenían todo el cuerpo escrofuloso; estaban pálidos como los muertos en la tumba, desenterrados por las gallinas« y después de someterse a una cura prolongada de Ajo de oso, ese magnífico don del Señor, se pusieron todos sanos y frescos.
MODOS DE PREPARACION
Como condimento: Las hojas frescas picadas (como el perejil) se emplean para aliñar bocadillos, sopas, salsas, ensaladas y platos de carne.
Tintura de Ajo de oso: Se trituran las hojas o los bulbos de la planta y se llena una botella, sin apretar, hasta el gollete. Después se cubre todo de un aguardiente puro de 3840° y se deja 15 días al sol o cerca de la lumbre. Se toman de 10 a 15 gotas diluidas en un poco de agua, cuatro veces al día.
Vino de Ajo de oso: Un puñado de hojas cortadas a pedacitos se hierven brevemente en aprox. 1/4 I de vino blanco. Endulzado con miel o jarabe se bebe de este vino unos cuantos sorbos distribuidos durante el día.
ALELUYA (Oxalis acetosella)
Sus nombres populares son, entre otros, Pan de cuclillo, Trébol acedo o Acederilla y se cría en los bosques, cubriendo por todas partes el suelo como un tapiz con sus hojas de un verdeclaro y sus finísimas florecitas blancas. Ofrece un aspecto verdaderamente encantador. Cuando estoy buscando setas, me agacho a veces para coger una hoja y comérmela. Las flores las recolecto en pequeñas cantidades para preparar una mezcla de tisana, indicada en la página 70.
La Aleluya no se deseca, sólo se utiliza fresca. Es un remedio contra la acidez del estómago y las indisposiciones del hígado y de la digestión. En estos casos se toman dos tazas al día de la infusión fría. Contra la hepatitis, la nefritis, las erupciones de la piel y los gusanos se administra la misma cantidad de infusión, pero se bebe templada.
La medicina popular recomienda el jugo fresco de Aleluya para combatir el cáncer de estómage incipiente, las úlceras y los tumores cancerosos, internos y externos. El jugo fresco se obtiene mediante una licuadora. Cada hora se toman de 3 a5 gotas, disueltas en agua o tisana. Los tumores externos se untan con el jugo fresco.
En los casos de parálisis agitante (enfermedad de Parkinson) se recomienda el jugo fresco, cada hora de 3 a 5 gotas diluidas en una infusión de Milenrama; en uso externo se hacen fricciones en la espina dorsal.
Es muy importante atenerse concienzudamente a las indicaciones acerca de la dilusión y la dosis, tanto en los casos de cáncer de estómago, úlceras y tumores, como en el de la enfermedad de Parkinson.
MODOS DE PREPARACION
Infusión: 1 cucharada sopera de hojas frescas se escalda con 1/2 I. de agua hirviendo y se deja reposar un poco.
Jugo fresco: Las hojas se lavan y se pasan por la licuadora.
GALIO (Galium)
Hay varias clases de Galio: El Amor de Hortelano (Galium aparine), que invade [as campos, prados y setos, por lo cual muchos agricultores tratan de eliminarlo con herbicidas; esta variedad alcanza una altura de 60 a 160 cm., las hojas forman rodajuelas y las florecitas verde-blancas se agrupan en ramilletes pedunculados. El tallo está armado con pelitos ganchudos con los que la planta se agarra a las matas vecinas o »a los pantalones del hortelano«, de donde viene su nombre.
El Galio (Galium verum) con sus nombres populares Cuajaleche, Hierba cuajadera o Presera, se cría con más abundancia en las regiones montañosas. Es de 30 a 60 cm. de altura y se mantiene erguida. Las flores tienen un hermoso color amarillo y despiden un olor a miel muy fuerte. Se recolecta en junio en plena floración.
El Galio blanco (Galium mollugo) tiene florecitas finísimas blancas o amarillentas, parecidas a las de la Gipsofila, de un delicado olor a miel. Crece en abundancia en los ribazos y en los bordes de los caminos y durante la floración suele tumbarse. Todas las mencionadas variedades del Galio tienen más o menos, según dónde se crían, las mismas virtudes curativas y el mismo uso.
Desgraciadamente esta planta tan frecuente ha ido cayendo con el tiempo en el olvido. Sin embargo, justamente hoy, deberíamos prestarle más atención, en una época en que el cáncer se extiende cada día más. Insisto aquí también, en que las hierbas recién cogidas son mucho más eficaces y que por eso en las enfermedades graves es imprescindible usar la planta fresca. En invierno también se encuentran brotes frescos del Galio blanco, p. ej. debajo de la hierba seca y donde no hay nieve.
La infusión de Galio depura los riñones, el hígado, el páncreas y el bazo de las sustancias tóxicas. Los que padecen de trastornos de las glándulas linfáticas deberían tomar cada día esta infusión, que actúa asimismo contra la clorosis, la hidropesía y las punzadas del costado. En uso externo, la infusión de Galio ayuda rápidamente a curar toda clase de afecciones de la piel, heridas, forúnculos y espinillas. Además se utiliza en forma de enjuagues calientes contra el cutis ajado. El jugo fresco de Galio da también muy buenos resultados untando con él diariamente las partes afectadas de la piel y dejándolo secar.
La Medicina Popular recomienda el Galio también contra la erisipela, la histeria, el baile de San Vito, las enfermedades de los nervios, la retención de orina, las arenillas y los cálculos. Para combatir el bocio hay que hacer varias veces al día gárgaras repetidas con la infusión. Una mujer me contó que no sólo desapareció el bocio, sino que también se le curó la afección del tiroides que tenía.
Cada año me encuentro en un balneario con un matrimonio vienés. Cuando nos vimos en 1979 constaté que la mujer tenía un bocio, y que ya se le notaba bastante. No se atrevía a operarse. Yo le recomendé el Galio. Dije que con la infusión caliente hiciera asiduamente gárgaras bien profundas. En febrero de 1980 nos volvimos a ver en el mismo balneario y — el bocio ya no estaba. La mujer me contó llena de alegría que su marido le había traído con frecuencia la planta recién cogida y desde el principio había observado como el bocio iba disminuyendo, hasta desaparecer por completo.
Últimamente se repiten los casos de parálisis de las cuerdas vocales. Parece que se trata de una enfermedad por virus. Contra ese mal ayuda rápidamente la infusión de Galio, en forma de gargarismos y enjuagues. Según el padre Künzle, el Galio es también un remedio indicado contra las graves afecciones o supuraciones renales, incluso cuando los demás medicamentos hayan fracasado. Los mejores resultados se consiguen con una mezcla de Galio, Vara de oro y Ortiga muerta amarilla, en partes iguales. Künzle dice que el efecto se demuestra ya a los 15 días. La infusión nunca se debe hervir. Se toma primero media taza, 30 minutos antes del desayuno, y el resto a sorbos durante el día. En los casos graves hay que tomar 4 tazas diarias.
Antiguamente el Galio era muy apreciado por las mujeres como un remedio contra las alteraciones de la matriz. Para facilitarles el parto, les metían a las parturientas una matas de la planta en la cama. Esta creencia pasó a las leyendas marianas. Una de ellas cuenta que la Virgen María se preparó el »lecho santo« con Galio y en otra se dice que la Virgen le hizo al Niño Jesús una almohada blanda con esta hierba. Según una narración de Silesia, la Madre de Dios se valió para su lecho del Galio porque era la única planta que el burro no comía. Y esto es verdad porque se sabe que a las vacas esta hierba les gusta mucho, mientras que los cerdos y los burros la desdeñan.
El padre Künzle habla en sus escritos de un hombre de 45 años afecto de una grave nefritis, que empeoraba cada vez más. Finalmente se le tuvo que extirpar un riñón. El otro también supuraba y no funcionaba normal. Entonces empezó el enfermo con una cura de Galio: 4 tazas al día de la mezcla arriba indicada (Galio, Vara de oro, Ortiga muerta amarilla). Bebía la infusión a sorbos distribuidos durante el día y finalmente se curó del todo. La misma mezcla de infusión se emplea contra la atrofia renal y todas las demás afecciones graves de los riñones.
El conocido fitobiólogo autriaco Richard Willfort sostiene en su obra »Gesundheit durch Heilkráuter« (salud debida a las plantas medicinales) que el Galio es un remedio excelente para combatir el cáncer de lengua, bebiendo la infusión y haciendo enjuagues con la misma; asimismo ayuda el jugo fresco mezclado con mantequilla a curar toda clase de úlceras y afecciones malignas de la piel.
Por otra parte, el doctor Heinrich Neuthaler escribe en su libro »Das Kráuterbuch« (el herbario): »El Galio blanco se sigue recomendando en algunas partes como remedio contra el cáncer, — una tontería que hay que rechazar con vehemencia. «
Para que ustedes, estimados lectores, puedan hacerse una idea sobre estas dos opiniones opuestas, voy a exponerles mis propias experiencias con el Galio. Hace diez años me enteré de que un dentista de Linz tenía cáncer de lengua. Después de la operación adelgazó considerablemente y lo querían mandar a Viena para que se sometiera a una radioterapia. Yo le aconsejé que hiciera gárgaras con infusión de Galio. Al cabo de una semana supe que la terapia de rayos ya no era necesaria y que el enfermo se recuperaba día a día. En poco tiempo, se curó.
Más tarde me contaron el caso de una mujer de 28 años que también tenía un carcinoma de lengua. Le recomendaron que consultara a un médico de Carintia. Este le prometió curarla dentro de 5 años y le dio unas hierbas, que la mujer me enseñó un día. Vi que era Galio y para que ella se ahorrara los gastos de viaje etc. le enseñé la planta para que pudiera recolectarla personalmente en el campo. Esta mujer también se curó de esa mala enfermedad.
Otro ejemplo: Era a fines de marzo, cuando una joven vienesa me contó que su madre, de 63 años de edad, estaba gravemente enferma y que iban a operarla por segunda vez el 19 de abril. Medio año antes, a la enferma le había crecido en poco tiempo un tumor canceroso en la laringe. El médico le ocultó la verdad diciendo que se tratabe de un bocio y entonces se realizó la primera operación. Durante los siguientes seis meses fue todo bien. Pero posteriormente le dieron unos dolores insoportables en el brazo izquierdo, que la atormentaban día y noche. La mano se hinchó y todo el brazo se puso tan insensible que no podía sostener con la mano ni siquiera una hoja de papel. Para aliviarle los dolores, el mismo médico (jefe de hospital) que había hecho la primera operación, propuso otra intervención quirúrgica que se realizaría, como ya se ha dicho, el 19 de abril, con el fin de seccionar un nervio situado entre el cuello y la clavícula; así por lo menos se liberaría de los peores dolores. Según dijo, no había otra solución desde el punto de vista médico. A pesar de todo, yo le aconsejé a la mujer que bebiera infusión de Galio y que hiciera también gargarismos con ella. Además le recomendé una mezcla de tisana que detiene el cáncer: 300 g de Maravilla, 100 g de Milenrama, 100 g de Ortiga (un litro y medio diario, cada 20 minutos un trago); convenía que hiciera también fricciones con pomada de Galio. Se podrán imaginar mi alegría cuando me enteré que a los cuatro días habían desaparecido los dolores. Hasta el 19 de abril la mujer recuperó la sensibilidad en el brazo y la mano y podía moverlos sin dificultad. El médico se extrañó mucho cuando la hija de la paciente le rogó que desistiera de la segunda operación y se quedó muy impresionado del informe detallado que le dio sobre el tratamiento con hierbas medicinales, y dijo: »I Que continúe su madre esa cura!« Después de algún tiempo supe que el estado de salud de la mujer era magnífico y que había vuelto a ocuparse de sus quehaceres de ama de casa de una familia numerosa.
Incluso úlceras cancerosas pueden curarse.
En la actualidad aumenta el número de dermatitis de carácter maligno, que se presenta en forma de manchas oscuras, ásperas y bien delimitadas. Seguramente se trata de una enfermedad infecciosa. En este caso ayuda un tratamiento con jugo fresco de Galio y pomada de Maravilla. Es importante que se tome simultáneamente una tisana purificante de la sangre, compuesta de Maravilla, Ortiga y Milenrama.
Una señora de Austria Alta padecía de un bulto que se le había formado en el paladar y que le causaba dolores en toda la boca. A los cuatro días de gargarismos con infusión de Galio desapareció el bulto y con ello todos los dolores.
Todo esto demuestra que la afirmación anterior, de que la administración de Galio en esta clase de enfermedades sea una tontería, no se mantiene en pie. Claro que las hierbas solas no curarían si no fuera con la ayuda del Todopoderoso. Al fin y al cabo, todo está en la mano de Dios.
MODOS DE PREPARACION
Infusión: 1 cucharadita repleta de Galio por cada 1/4 I. de agua; no hervir; reposar brevemente.
Jugo fresco: Galio recién cogido se lava y antes de que se seque se pasa por la licuadora.
Pomada: El jugo fresco de Galio se mezcla con mantequilla a temperatura ambiente hasta formar una crema. Se guarda en la nevera.
HIPERICO, HIERBA DE SAN JUAN (Hipericum perforatum)
Esta hierba medicinal se cría en los setos y ribazos frescos, en los prados no demasiado húmedos, a orillas de los caminos y bosques y florece de mayo en adelante. Sus nombres vulgares, Hierba de las heridas y Hierba militar, ponderan su gran reputación como planta curativa.
La planta, de 25 a 60 cm. de altura, tiene un tallo principal endurecido y muy ramificado, con un ramillete terminal de flores de color amarillo dorado. Para identificarla con más seguridad se estruja una flor abierta hasta que se vea salir un jugo rojo. Se recolecta el tallo florido para la preparación de infusiones y baños; para el aceite de Hipérico se utilizan sólo las flores.
Antiguas creencias populares relacionaban el jugo balsámico rojo con la sangre y las heridas de Nuestro Señor Jesucristo. Yen efecto, el aceite de Híperico es el mejor aceite vulnerario: calma los dolores, reduce la inflamación y cura. Una leyenda sobre la Hierba de San Juan (Hipérico) cuenta que estando el discípulo preferido del Señor hondamente afligido al pie de la Cruz, recogió piadosamente las hierbecillas bañadas en la sangre divina para ofrecerla a los fieles como recuerdo de la muerte del Salvador. Y misteriosamente, el jugo rojo de la Hierba de San Juan, evoca en nosotros la impresión, de que una gota de sangre de nuestro salvador se esconde en el colorante de las flores.
El día de San Juan, símbolo de los poderes sagrados de la luz y del calor, la Hierba de San Juan está en plena floración. Antes las mozas solían hacer coronas con ella y se las ponían los que bailaban alrededor de las hogueras. En esa noche llena de misterios también se echaban ramitas de la planta en el agua, y las doncellas, según se abrían o no las flores marchitas, sabían si iban a tener novio el próximó año. En Austria Alta los campesinos tenían la costumbre de ofrecerles a sus animales, para preservarlos de las enfermedades, unas ramas de Hipérico entre dos tajadas de pan. Es un lástima que esta tradición sólo se haya conservado en algunas familias religiosas.
Todo lo antedicho demuestra en cuánta estima se tenía el Hipérico desde tiempos remotos.
La infusión de Hipérico se utiliza en las lesiones de los nervios y toda clase de trastornos nerviosos, en las contusiones y en las lesiones por esfuerzo.
Con el Hipérico se combate también la neuralgia del trigémino, tomando 2 ó 3 tazas de infusión al día y untando durante un tiempo prolongado las partes del cuerpo afectadas con aceite de Hipérico. — Bajo »Arnica de los nerviosa se conoce una tintura hecha de Hipérico que puede hacerse uno mismo y que es muy eficaz contra las enfermedades de los nervios, las neuritis, las neurosis, el insomnio y la debilidad nerviosa.
Los trastornos del lenguaje y del sueño, los accesos de histerismo y el sonambulismo se curan con el Hipérico; asimismo la eneuresis (orinarse en la cama) y las depresiones. Según mis experiencias, en todas estas enfermedades se consigue muy buenos resultados, si a parte de la infusión en uso interno, se toman baños de asiento: uno por semana y los demás días pediluvios. Este tratamiento se recomienda en todos los trastornos debidos a los nervios.
Las jóvenes en la pubertad deberían tomar durante una temporada cada día 2 tazas de infusión de Hipérico; esta cura favorece el desarrollo de los órganos de la mujer y ayuda a equilibrar las irregularidades de la menstruación.
Un remedio vegetal de gran renombre es el aceite de Hipérico. No debe faltar en ningún hogar. Puede hacerse fácilmente por uno mismo (véase »Modos de preparación«). Conserva sus virtudes curativas durante dos años y se aplica con mucho éxito en las llagas abiertas, las heridas recientes, los hematomas, las inflamaciones de las glándulas y, como cosmético, en el cutis ajado; en forma de fricciones es muy eficaz contra los dolores de espalda, el lumbago, la ciática y el reumatismo. Para tener siempre a mano un excelente remedio casero contra las quemaduras y escoceduras, se maceran las flores en aceite de lino. Este aceite también se emplea en el tratamiento de las quemaduras del sol. Los nenes pequeños con dolores de tripa se calman pronto si se les frota la barriguita con aceite de Hipérico. — conozco a una campesina que cura toda clase de heridas, incluso las de sus animales domésticos, con aceite de Hipérico. Su marido se cogió un día la mano en una máquina y se hirió gravemente. Compresas con aceite de Hipérico calmaron muy pronto los dolores y cicatrizaron las heridas sin problemas. — Otro campesino curó con este aceite una grave herida externa en el pie de su caballo.
Un médico diagnosticó una inflamación de las glándulas linfáticas en la barriga de una niña de 8 años. Cada vez que la niña se exponía al frío le daban dolores de barriga, que últimamente se presentaban cada día, sobre todo por la mañana. La madre leyó en este folleto que el aceite de Hipérico ayudaba contra las inflamaciones de las glándulas. Cada vez que la niña se quejaba de dolores, la mujer le frotaba la barriga con el aceite. Al poco tiempo desapareció el mal.
MODOS DE PREPARACIÓN
Infusión: Se escalda una cucharadita repleta de hierba con 1/4 I. de agua hirviendo y se deja reposar brevemente.
Aceite de Hipérico: Se recolectan las flores mientras el sol esté en lo alto, se llena con ellas una botellita hasta el gollete. Después se cubren las flores con un aceite fino de oliva. Bien cerrado se deja en maceración durante unas semanas, al sol o cerca de la lumbre. Finalmente se filtra a través de un lienzo, se exprime bien los residuos y se guarda en botellas de cristal oscuro. Para el tratamiento de quemaduras se prepara la maceración con aceite de lino.
Tintura: Sobre 2 puñados de flores, cogidas en un día de sol, se echa un litro de aguardiente y con la botella bien cerrada se deja reposar 3 semanas al sol o cerca de otra fuente de calor.
Baños de asiento: Un cubo lleno de Hipérico (tallos, hojas y flores) se deja durante la noche a remojo en agua fría. Antes del baño se calienta hasta que rompa a hervir y después de colarlo se mezcla con el agua del baño.
Duración del baño: 20 minutos (véase en Generalidades »Baños de asiento«).
LICOPODIO (Lycopodium clavatum)
Esta planta siempreviva forma como un musgo, con tallos rastreros de uno hasta dos metros de longitud que se arraigan en el suelo con raicitas finísimas. De los tallos brotan ramitas, suaves al contacto, de 7 a 10 centímetros de largo, ramificadas y muy frondosas. En verano nacen de esta planta cuadrienal unas panículas amarillentas que traen esporas, llamadas también Polvos de Licopodio. Estos polvos se emplean homeopáticamente para curar excoriaciones.
El Licopodio es una planta medicinal que contiene radio y que por sus tallos extendidos, a modo de maromas, y las esporas amarillentas de sus panículas se puede distinguir fácilmente de las otras clases de musgos. Sólo se cría en las vertientes nórdicas de los bosques y sus orillas, a partir de una altura de 600 m. Después de producirse desmontes completos, la planta se vuelve amarilla, hasta que desaparece del todo, ya que no puede vivir bajo insolación directa.
En Austria y Alemania el Licopodio está bajo la protección rigurosa del Estado. Por eso recomiendo que adquieran la hierba en farmacias y herbolarios. Los mayoristas compran el Licopodio en los países nórdicos, lo que garantiza una buena calidad. Para enfermos de gota y de reuma, aun cuando ya se hayan deformado las articulaciones, contra el estreñimiento crónico y almorranas, el Licopodio en infusión es un remedio muy aconsejable. Las personas que padecen de diarreas deben »0› tener mucho cuidado al tomar esta infusión; pues podría producirles calambres intestinales. El Licopodio nunca se debe hervir, sino que solamente se escalda con agua hirviendo. La infusión también se emplea (11 contra todas las enfermedades de los órganos genitales y urinarios, los dolores e induraciones de los testículos y contra la formación de arenillas ( renales y cólicos nefríticos. El Licopodio es indispensable para curar la hepatitis y la excrecencia del tejido conjuntivo del hígado (hígado grande) aun cuando ya se denota su malignidad. Ayuda al convaleciente a recuperar rápidamente sus fuerzas.
El marido de una señora mayor, conocida mía, padecía ya desde hacía muchos años de disnea nocturna grave, tratada como asma de corazón. Se sentía cada vez peor, hasta que un día fue otra vez al médico. »Si no deja enseguida de trabajar, dentro de ocho días se morirá.« El médico lo mandó al hospital. De su mujer supe que tenía cirrosis hepática en su última fase. La cirrosis va acompañada de disnea nocturna. Poco tiempo después mandaron al hombre a casa, ya que no tenía ninguna esperanza de sobrevivir. Yo le aconsejé a la señora que le diera a su marido Licopodio, lo que le ayudó enseguida. ¿No le parece a Vd. también como un milagro el hecho de que después de tcimar el hombre la primera taza de infusión de Licopodio, le despareciera la respiración penosa nocturna bajo la cual había sufrido tantos años?
Si entre sus amistades conoce a alguien con cirrosis, aunque ya no tenga remedio, déle ánimo y recomiéndele Licopodio, esta planta radioactiva de tanta importancia para la medicina natural. Incluso personas que sufren enfermedades malignas del hígado pueden reconquistar la vida mediante el Licopodio.
Estando un día herborizando en un bosque de la Austria Alta con un pequeño grupo, le llamé la atención a mi acompañante, el fitibiólogo Dr. Bruno Weinmeister, sobre las virtudes curativas del Licopodio en los casos de cirrosis y cáncer del hígado. Entonces él me contó el siguiente episodio: Siendo todavía un joven estudiante hizo con unos amigos una excursión a las montañas. En el sendero que conducía al refugio se encontró entre unos pinos carracos un tallo de Licopodio que se puso de broma enrollado sobre su sombrero. Más adelante, al llegar al refugio, uno de sus compañeros tuvo un calambre de pie muy doloroso, que llegó a torcerle la pierna desde la rodilla. Todos intentaron ayudarle, pero fue en vano. El dueño del refugio trajo aguardiente para frotarle pero no ayudó. Entonces el joven Weinmeister, en un momento de intuición, se quitó el tallo de Licopodio del sombrero y envolvió con él el pie acalambrado desde abajo hacia arriba. Imnediatamente se puso el pie en su posición normal. El joven pensó que había sido una casualidad, probablemente la convulsión hubiera desaparecido también sin el Licopodio. A la vuelta cogió para el ama de su casa que padecía frecuentemente de calambres de la pantorrilla (sural), un puñado de Licopodio. La mujer fue inmediatamente librada de sus calambres. Varios años después habló el Dr. Weinmeister con un especialista sobre este acontecimienro. El médico le señaló que el Licopodio era una planta radioactiva. Desde entonces han sido curadas muchas personas de sus calambres de pie y pantorrilla aplicando almohadillas de Licopodio a las partes enfermas.
Una conocida mía ingresó en el hospital porque no podía orinar. El brazo lo tenía todo hinchado. Cuando salió del hospital, todo comenzó de nuevo. Por suerte tenía yo justamente Licopodio en casa, ya que mi suegra, de 86 años, padecía en aquella época de calambres de pantorrilla. Mi sospecha que en el caso de mi conocida se trataba de un calambre de vejiga (convulsión de la vejiga) se confimó cuando al ponerle a la mujer un saquito de Licopodio desecado sobre la parte de la vejiga, pudo orinar dos minutos después normalmente. Ella llevó aún unos días este saquito de Licopodio sujeto en la zona de la vejiga; la hidropesía (el edema) del brazo también fue desapareciendo poco a poco.
Yo misma sufría muchos años de hipertensión (tensión alta de la sangre). Esta suele venir de una hiperfunción del riñón. Así que me puse durante la noche en la zona renal un saquito lleno de Licopodio; al día siguiente mi tensión había bajado de 200 a 165. Desde entonces me pongo de vez en cuando un saquito con Licopodio fresco en la zona de los riñones.
Contra los calambres de pantorrilla se envuelve el Livopodio en una tela y se ata en torno de la pantorrilla. Pero también se pueden hacer baños de pie y contra convulsiones de la vejiga baños de asiento de Licopodio (véase en Generalidades »Baños de asiento«).
Como consecuencia de heridas de guerra y accidentes resultan muchas veces cicatrices que provocan convulsiones.
Un inválido de guerra tenía en la espalda una cicatriz tan profunda que se podía meter la mano en ella. Esta herida le causaba continuamente calambres dolorosos que le provocaban sudaderas profusas. Los dolores se le extendían hasta el cuero cabelludo. Después de un martirio que había durado 30 años, pude librar a este hombre de su tormenta mediante almohadillas y baños de Licopodio.
Las esporas del Licopodio, los llamados »polvos de Licopodio« o »azufre vegetal,« que venden en algunas farmacias, ayudan a enfermos graves a cicatrizar rápidamente úlceras de decúbito. Se espolvorea suavemente el polvo de Licopodio sobre las llagas abiertas. Frecuentemente ya se hace sentir un gran alivio después de la primera aplicación. (Sobre otros éxitos terapéuticos con Licopodio léase en el folleto »Maria Treben's Heilerfolge« - Éxitos terapéuticos de María Treben, publicado en la editorial Wilhelm Ennsthaler, A-4400 Steyr, Austria).
Quien como yo, está tan familiarizado con las hierbas medicinales y ha obtenido con ellas tantos éxitos, que hacen pensar en milagros, no olvida que es el creador del Universo quien extiende esta riqueza ante nuestros pies. Sin embargo muchos tropiezan con ellas y no advierten la omnipotencia del cielo.
MODOS DE PREPARACION
Infusión: Se echa 1/4 de litro de agua hirviendo sobre una cucharadita rasa de Licopodio y se deja reposar brevemente. Se bebe sólo una taza al día a pequeños sorbos, por la mañana, media hora antes del desayuno. Quien padezca de cirrosis hepática o de una enfermedad tumorosa del hígado debe beber 2 tazas.
Almohadilla de Licopodio: Con Licopodio desecado (100 gramos — 300 gramos) según dimensión de la parte acalambrada se llena una almohadilla que se aplica durante la noche sobre la zona doliente. Esta almohadilla conserva todo un año su efecto.
Baños de asiento: Véase en »Generalidades«.
LLANTEN MENOR (PI antago lanceolata)
Entre la abundancia de nuestras hierbas medicinales voy a tratar ahora de una que, según parece, en tiempos antiguos era tan común como hoy y gozaba también de gran fama. Su nombre alemán es »Wegerich« cuyo sentido etimológico es »rey de los caminos«. En un códice, probablemente del siglo XI, se halla un ensalmo anglosajón que invoca a nueve plantas, entre ellas al Llantén:
»Y tú, Llantén madre de las plantas
de cara al Este poderosa adentro:
sobre ti, carros chirriando sobre ti, mujeres cabalgando sobre ti, novias cabalgando sobre ti, becerros bufando.
A todos resististe
a todos te opusiste.
¡ Resiste pues al veneno y al contagio y al mal que camina sobre el país!«
El mal camina sobre el país, hoy como antaño, y necesitamos de las plantas curativas como el Llantén, glorificado en todos los herbarios. El Llantén mayor (Plantago major) tiene las mismas cualidades y el mismo uso que el Llantén menor. Las dos variedades crecen en las orillas de todos los caminos y campos, en los ribazos y en lugares incultos y húmedos y se crían prácticamente en todas las partes del Llantén mayor mundo.
El Llantén se utiliza en primer lugar contra todas las afecciones de las vías respiratorias, sobre todo en los casos de catarro, tos, tos ferina, asma pulmonar e incluso tuberculosis pulmonar. El padre suizo Künzle, médico naturista y conocedor de las grandes virtudes curativas de nuestras plantas, escribe: »En todas las variedades del Llantén se utiliza la planta entera con raíz, hojas, flor y semilla. Limpia mejor que otra hierba la sangre, el pulmón y el estómago, y por eso es buena para todas las personas que tienen la sangre sucia, los pulmones y los riñones endebles, la cara pálida, erupciones, roña o líquenes, o los que tienen tosecillas o se enronquecen o siempre están delgados como las cabras aunque se les meta en una cuba de mantequilla. Pone a flote a los niños débiles que a pesar de recibir buenos alimentos se quedan atrasados.
Yo misma he podido ayudar a muchos en casos de asma pulmonar y bronquial con una infusión de Llantén y Tomillo, en partes iguales (véase »Modos de preparación«). Esta tisana la recomiendo también para combatir afecciones del hígado y de la vejiga.
En bronquitis, asma bronquial y pulmonal la infusión es muy eficaz si se prepara de la siguiente manera: Se pone al fuego una taza de agua fría con una rodaja de limón (si está tratado químicamente, se quita la piel) y una cucharadita repleta de azúcar moreno y se le da un hervor; después se retira del fuego, se echa una cucharadita repleta de la mezcla de hierbas y se deja reposar medio minuto. En los casos graves se prepara la infusión 4 ó 5 veces al día y se toma recién hecha y lo más caliente que se pueda beber.
Según se puede leer en antiguos herbarios, la semilla del Llantén ayuda contra la formación de cálculos si se toman de ella 8 gramos al día. Aparte se bebe tisana de Llantén. El jarabe de Llantén (véase »Modos de preparación«) depura la sangre de todos los residuos y materias morbosas. Se debería emplear en forma de una cura, tomando antes de cada comida una cucharada y los niños una cucharadita.
En el ámbito labriego se sabe que el Llantén es un remedio vulnerario muy apreciado desde tiempos remotos. Una vez estuve presente cuando un campesino que estaba trabajando en el campo se lastimó gravemente con una herramienta. Me sorprendí cuando vi que el hombre arrancó unas hojas de Llantén, las desmenuzó aplastándolas y se las puso en la herida. Esta no se infectó aunque la hierba estaba sin lavar. Las hojas recién cogidas y machacadas, aplicadas en forma de cataplasmas, ayudan a curar las grietas, las cortaduras, las picaduras de avispa e incluso las mordeduras de perros y bichos venenosos como las serpientes. En este último caso se utiliza provisionalmente, cuando no se tiene médico a mano. En un antiguo herbario pone: »Si al sapo le pica la araña, va corriendo al Llantén, el cual le ayudará.«
Las hojas frescas, restregadas con las manos y mezcladas con un poco de sal, curan el bocio aplicándolas en el cuello. Para sanar las ampollas que se producen al caminar mucho, se mete unas hojas de Llantén en los zapatos. Los tumores, por malignos que sean, desaparecen si se tratan con hojas de Llantén machacadas. Asimismo ayudan, aplicándolas en las partes enfermas, contra las afecciones malignas de las glándulas. En estos casos conviene emplear también aceite de Mayorana (Origanum majorana). En una botellita se mete Mayorana fresca (en casos urgentes se puede utilizar seca), se cubre de aceite de oliva y se deja 10 días en un lugar cálido. Con el aceite de Mayorana, conseguido de esta forma, se untan las glándulas enfermas, se les aplica una cataplasma de hojas machacadas de Llantén y se cubre todo con un paño. Pronto se notará mejoría.
En ocasión de una conferencia que di en la casa parroquial de la catedral de Linz, señalé que las hojas machacadas del Llantén curaban toda clase de heridas, aunque tuvieran 10 añosa Cuando a los 5 meses hablé en el colegio de enfermeras de la misma ciudad, una mujer pidió la palabra: »Yo dudaba de que las hojas del Llantén curaran las heridas aunque fueran antiguas, según dijo usted la última vez. Mi vecina tenía desde hacía 17 años una llaga abierta en el pie, por lo que no salía de su casa. Yo le traje al día siguiente de su conferencia, las hojas y las apliqué a la pierna enferma, según sus indicaciones. Tengo que retirar mi duda: La herida se cicatrizó en poco tiempo, lo cual nos dejó atónitos, y no ha vuelto a abrirse en los últimos 5 meses.«
Otro ejemplo: Un inválido de guerra con una pierna artificial tenía a causa del calor continuo del verano heridas abiertas en el muñón. A pesar de diversos tratamientos con ungüentos, rayos X e inyecciones no se curaban las llagas. Pero al tratarlas con Llantén se cicatrizaron de un día a otro y el hombre pudo volver a su trabajo habitual.
Yo misma conseguí una vez una curación rápida con el jugo fresco de hojas de Llantén. Hace años, mi nieto de un año que llevaba yo en el brazo, me dio jugando, un mordizco muy fuerte en la mejilla sobre la comisura de la boca. Durante unos días esa mordedura me hacía mucho daño y por eso me la unté varias veces con jugo fresco de Llantén, pero estaba inquieta por miedo a que se formara una induración maligna. A fines de abril fui con mi marido a Freistadt a un congreso. De repente me di cuenta de que de un día a otro se había formado en el lugar de la mordedura un nudo endurecido del tamaño de un guisante. Salí enseguida a coger en el prado un puñado de Llantén y durante el día iba estrujando hojas y untándome el bultito varias veces con el jugo. Por la noche ya no se notaba casi nada el endurecimiento y al dia siguiente observamos con gran satisfacción que había desaparecido del todo. Como vemos, el padre Kneipp no exagera cuando dice en sus escritos que »contra cada mal hay una hierbecilla«. Cuanto más profundizo en el conocimiento de las hierbas medicinales, más numerosos son los milagros que experimento. Mucha gente muere cada año atormentada de dolores, debido a tumores cancerosos, habiendo plantas curativas adecuadas. Cuánta salud y cuánto ánimo podríamos recobrar si les hiciéramos más caso a las plantas medicinales. A los ojos de los ignorantes, desde luego, no son nada más que hierbas malas. ¡Dedíquese usted más a las hierbas medicinales y verá como poco a poco desaparecerán todos sus males!
Con estas palabras también quiero devolverles valor y confianza a las personas ancianas que padecen desde años de pies llagados. El Llantén también cura sus heridas. La edad no tiene que ver nada en este caso. Si los pies están además hinchados, hay que hacer pediluvios con una maceración de Malva o de Cola de caballo. Las orillas de las llagas se untan después del baño con una pomada de Maravilla (véase en Maravilla »Modos de preparación«). Incluso en los casos de trombosis recomiendo calurosamente el tratamiento con Llantén.
Estos ejemplos demuestran claramente que uno puede confiar en la Farmacia del Señor, incluso cuando los médicos ya no den esperanzas.
MODOS DE PREPARACION
Infusión: Escaldar una cucharadita repleta de hojas con 1/41. de agua hirviendo y reposar brevemente.
Mezcla de tisana: Hojas de Llantén y Tomillo se mezclan en partes iguales y se prepara una infusión (véase en el texto).
Cataplasmas de hojas frescas: Las hojas lavadas se machacan en un mortero hasta que se forme a modo de una papilla, que se aplica a las partes dañadas del cuerpo.
Jarabe N°1: 4 puñados de hojas de Llantén se pasan por una máquina de picar. A la masa resultante se le añaden 300 g. de azúcar moreno y 250 g. de miel de abeja y se pone al fuego con un poco de agua para que no se coja. Removiéndolo se hierve lentamente hasta que se forme un líquido espeso, que se echa, caliente, en botes de cristal y se guarda en la nevera.
Jarabe N°2: Un bote grande de cristal se va llenando con capas de hojas de Llantén lavadas y azúcar moreno. Se aprieta todo bien y se deja posar. Al día siguiente se continúa llenando el bote del mismo modo hasta que ya no quepa nada más. En un rincón del huerto se hace un hoyo en el que se mete el bote previamente bien tapado con tres o cuatro hojas de papel apergaminado. Encima del bote se coloca una tabla y sobre ella una piedra. Ahora se cubre todo de tierra. La tabla y la piedra tienen que estar a la vista. La temperatura constante de la tierra provoca una fermentación que convierte el azúcar y las hojas en un jarabe. A los tres meses se saca el bote, se exprime el jugo en la licuadora, se le da un hervor y se guarda en botes pequeños que se puedan cerrar bien.
Quien no tenga la posibilidad de preparar esta forma de fermentación, puede dejar el bote al sol o cerca de otra fuente de calor hasta que se sedimente el jarabe. A éste también se le da un hervor.
Apuntes del libro: Salud de la Botica del Señor de Maria Treben de Editorial Ennsthalec
CONSEJOS PARA CURAR DIVERSAS ENFERMEDADES
ABORTOS
Hay mujeres que no pueden llevar a término el embarazo y padecen frecuentes abortos. Estas mujeres deberían tomar cada día dos o tres tazas de infusión de Milenrama y Pie de león. También ayudan los brotes primaverales del Carpe, un arbusto que se planta en los setos que rodean los jardines. Los brotes, que consisten en tres hojitas, se hierven brevemente con leche, la cual se cuela y se mezcla con una yema de huevo y un poco de harina tostada en manteca. Esta sopa debería tomarse como cena durante unas semanas o, eventualmente, unos meses. Con este tratamiento disminuirán los casos de abortos.
ACNÉ
Se trata de una típica enfermedad de la pubertad y se debe en parte a un riñón trastornado. Por eso hay que evitar las comidas muy saladas y con muchas especies, así como las ensaladas con vinagre y las bebidas. Las ensaladas se pueden sazonar con yogur. Contra el acné se toma diariamente un litro de infusión de Ortiga a sorbos distribuidos durante el día.
Tratamiento externo: Por la mañana y por la tarde se unta la cara mojada con una maceración de Rábano rusticano, que se deja actuar durante diez minutos. La maceración se prepara de la siguiente manera: En una botella se mete raíz de Rábano rusticano rallado y se cubre de un vinagre de vino o de fruta. El vinagre tiene que sobrepasar las raíces. Se deja 10 días en maceración a temperatura ambiente. Como el vinagre se utilizará sin colarlo, conviene prepararlo en una botella de plástico — esterilizada con agua hirviendo — con tapón agujereado. El rábano rusticano suaviza la acidez del vinagre y éste disminuye la intensidad del Rábano rusticano. Así se obtiene una esencia de vinagre suave, para cada tipo de cutis.
AFECCIONES DEL CORAZÓN Y DE LA CIRCULACIÓN
Ya que en los últimos años los infartos van en aumento y parecen alcanzar los límites de una enfermedad nacional, recomiendo la siguiente mezcla de tisana, que da excelentes resultados en las afecciones del corazón y de la circulación:
10 g. de Cola de caballo
10 g. de Galeopsis
10 g. de Ruda
10 g. de Diente de león
10 g. de Centinodia
10 g. de vainas de Judía
10 g. de raíz de Pimpinela
10 g. de Pan y quesillo
10 g. de Árnica
10 g. de corteza de Arraclán
30 g. de Espino albar
10 g. de Sargazo vejigoso
20 g. de Muérdago
10 g. de Bardana
20 g. de Mate
10 g. de Ansarina
10 g. de Milenrama
10 g. de Fumaria
10 g. de Agripalma
10 g. de Musgo de Irlanda
(no Liquen de Islandia)
10 g. de Cálamo aromático
10 g. de Gatuña
10 g. de Grama
10 g. de Melisa
Se mezcla todo bien y se toma una cucharadita colmada por cada taza de tisana. Esta se prepara en frío poniendo las hierbas a remojo durante la noche y calentándolo todo un poco al día siguiente. Hay que tomar dos tazas al día, una por la mañana y otra por la noche, endulzadas con una cucharadita de miel.
ANGIOMAS
Se llena una botella hasta el gollete con hojas de Cedro o de Ciprés lavadas y trituradas y se cubre todo de un aguardiente de 38-40°. A continuación se deja 10 días en maceración, al sol o cerca de la lumbre. Con esta tintura se unta repetidas veces al día el angioma.
El jugo fresco de Siempreviva también contribuye a que desaparezca poco a poco el angioma; hay que cortar las hojitas a lo largo y untar la zona dañada con el zumo.
Igualmente ayuda el jugo fresco de los tallos carnosos de Maravilla, que se obtiene mediante una licuadora. Las gotas de Hierbas Suecas, empleándolas repetidas veces, también eliminan esta afección de la piel tan pertinaz.
Los jugos y tinturas indicados también actúan favorablemente contra los nevus maternos y vasculares, los trastornos pigmentarios, el prurito senil, las manchas blancas de la piel y las verrugas. Un niño de dos meses tenía en el pecho un angioma como media lenteja que querían opérale. La madre, preocupada por si la operación trajera consigo alguna complicación, empezó a untarle al niño varias veces al día la parte afectada de la piel con gotas de Hierbas Suecas. Después de unas 6 semanas el angioma había desaparecido.
ARTRITIS - ARTROSIS - COXARTROSIS
Las indicaciones siguientes se refieren también a las inflamaciones y deformaciones de las articulaciones y a las lesiones por desgaste. Todos estos males se curan y los dolores se pierden con el tiempo. Los enfermos que usan muletas y bastones pueden prescindir de éstos relativamente en poco tiempo. Se toma por la mañana, media hora antes del desayuno, y por la noche, media hora antes de la cena, cada vez una taza de infusión de Cola de caballo que se deja reposar sólo medio minuto. Durante el día se administran cuatro tazas de infusión de Ortiga (escaldar y reposar brevemente). A tres de estas cuatro tazas se le añade una cucharadita de Hierbas Suecas. Se bebe cada vez una mitad antes y la otra después de las comidas.
Dondequiera que se presenten dolores, sea en la rodilla o en otras articulaciones, se aplica una compresa de Hierbas Suecas que se deja actuar durante cuatro horas. No se olvide de untar la piel antes con manteca de cerdo o pomada de Maravilla y de empolvarla después, para que no se presente prurito.
Hojas de repollo o de col rizada planchadas bien caliente y aplicadas a las partes doloridas también dan alivio. Hay que cubrirlas bien con un paño para que se mantengan calientes.
Fricciones con tintura de Consuelda ayudan asimismo a calmar los dolores. Contra las inflamaciones de las articulaciones se hacen cataplasmas de Cola de caballo al vapor (véase »Cola de caballo«, Modos de preparación). Aparte de las hojas de repollo y col rizada, recomiendo también aplicaciones con Pánace heraclio (Heracleum spondylium). Esta planta se cría en los prados y ribazos; también se encuentra entre los matorrales de toda clase de bosques no demasiado espesos. Está coronada de umbelas grandes y anchas de color muy variable entre un verdoso y un rosa pálido y sobresale en los prados y en los bordes de los campos por su porte vigoroso.
Nuestra abuela tuvo a los 93 años repentinamente un bulto en la rodilla que le dolía mucho. Ella, que siempre había sido tan ágil, tuvo que servirse de un bastón para poder andar y aun así casi no lo lograba. Yo le apliqué durante 15 días compresas de Hierbas Suecas, cada día cuatro horas, y por la noche hojas de col calentadas con la plancha caliente. Los dolores se calmaron un poco pero todavía no podía andar normalmente. Entonces fui a buscar hojas de Pánace heraclio y el mismo día tuve éxito con ellas. Las apliqué durante la noche, lavadas y machacadas, sobre la rodilla enferma. Al día siguiente la abuela pudo andar sin dolores pero todavía se le veía el bulto. Por eso le apliqué la noche siguiente otra cataplasma igual y a nuestro gran placer también desapareció la hinchazón. Nuestra abuela, que ahora tiene 94 años sigue todavía andando sin bastón. Todos los dolores de la rodilla se le quitaron.
Es muy aconsejable hacer una vez al mes un baño de asiento de Cola de caballo: 100 g. de hierba se ponen a remojo durante la noche, se calienta todo ligeramente y se cuela; duración del baño: 20 minutos. Después del baño se puede volver a echar el líquido sobre las hierbas y utilizarlo dos veces más calentándolo previamente.
Una monja me escribió lo siguiente: »En abril me dirigí a usted para que me aconsejara algún remedio contra mis dolores que no me dejaban pegar un ojo. Según sus indicaciones empecé a tomar cada día infusión de Ortiga, mezclada con tres cucharaditas y una cucharada sopera de Hierbas Suecas. Con gran satisfacción puedo comunicarle que a los seis meses ya no sentía ningún dolor en la cadera y no hace falta que me operen. Como trabajo en una residencia de ancianos, he tenido ocasión de ayudar a muchas personas con las hierbas medicinales. «
ATAQUE DE APOPLEJIA (prevención)
Los síntomas típicos que preceden a esta enfermedad son: gran inquietud, mareo, miedo, cara desfigurada e ilusiones auditivas. Es imprescindible consultar al médico. Se recomienda sobre todo moderación en la comida y lentos paseos al aire libre. Toda clase de alcohol (con excepción de las Hierbas Suecas), tabaco y café están estrictamente prohibidos. Se toman dos tazas de maceración de Muérdago, una por la mañana y otra por la noche y además dos tazas de infusión de Salvia a sorbos espaciados durante el día; sobre la zona de los riñones se aplican compresas de Hierbas Suecas y sobre el corazón compresas húmedas y frías.
He aquí una mezcla de tisana muy aconsejable: raíz de Angélica, Ansarina, Valeriana, Cincoenrama, flor de Espliego, Mayorana, Imperatoria, Cariofilada, Romero, Salvia, Violeta e Hisopo. Se mezcla todo bien en partes iguales. Preparación: Se pone al fuego un cuarto de litro de sidra y cuando rompa a hervir se vierte sobre una cucharadita colmada de la mezcla de hierbas y se deja reposar tres minutos. Esta cantidad, preparándola y bebiéndola varias veces al día, puede prevenir un ataque de apoplejía, que se da a conocer con los síntomas arriba indicados.
ATAQUE DE APOPLEJIA (con manifestaciones de parálisis)
En primer lugar hay que someterse a una cura de Muérdago: Durante las primeras seis semanas se toman 3 tazas diarias; en las siguientes tres semanas 2 tazas y en las siguientes dos semanas 1 taza de maceración de Muérdago. Preparación: Una cucharadita repleta de Muérdago se pone a macerar durante la noche en 1/4 I. de agua fría; por la mañana se calienta un poco y se cuela. Para que no se tenga que calentar la maceración otra vez, se pone toda la ración del día en un termo enjuagado previamente con agua caliente; si no se calienta al baño de María.
Hipérico, Verónica, Espliego, Melisa, Romero y Salvia se mezclan en partes iguales y se prepara una infusión escaldando una cucharadita colmada con 1/4 I. de agua hirviendo y dejando reposar brevemente. De esta infusión se bebe una taza por la mañana y otra por la noche.
Compresas de Hierbas Suecas aplicadas sobre el cogote fomentan la circulación de la sangre y reactivan las células cerebrales. La parte del cuerpo afectada se frota con tinturas estimulantes de Milenrama, Hipérico, Pan y quesillo o Serpol. También se recomiendan fricciones en las zonas paralizadas con aceite de Serpol y de Hipérico. Para obtener la tintura se llena una botella hasta el gollete de hierbas y se cubre todo de un buen aguardiente (38400); el aceite se obtiene cubriendo las hierbas de aceite de oliva virgen. Los líquidos deben sobrepasar en ambos casos el nivel de las hierbas y se tiene que dejar en maceración 10 días al sol o cerca de la lumbre.
Aparte se toman baños de asiento de Milenrama y Cola de caballo con 100 g. de hierba y baños completos de Serpol con 200 g. de hierba por baño. Las hierbas se ponen a remojo durante la noche, se calienta todo y se mezcla la maceración con el agua de baño. Duración del baño: 20 minutos; en el baño completo el corazón debe permanecer fuera del agua. Estos baños se pueden utilizar todavía dos veces, volviéndolos a mezclar con las hierbas y calentándolos antes de tomar el baño. No conviene emplear más que una clase de hierba por semana.
Para activar las partes paralizadas se aplican cataplasmas calientes de hojas de Consuelda. Las hojas se escaldan y se envuelven enseguida en un lienzo que se aplica a las partes enfermas. Por la noche se le puede cambiar al enfermo la almohada por una rellena con hojas desecadas de Helecho (sin tallos). Notará un gran alivio.
Nuestra abuela, de 94 años, tuvo un ligero ataque de apoplejía. Al despertarse no pudo hablar y el párpado izquierdo le colgaba hasta la mitad del ojo. Nosotros le aplicamos enseguida tres o cuatro compresas frías, según el método de Kneipp, sobre la frente y los ojos; cuando llegó el médico, todo estaba ya en orden. A mediodía comió en la cama una comida ligera y para cenar ya pudo sentarse con la familia a la mesa.
ATROFIA DE LAS ENCIAS Y DIENTES MOVILES
En estos casos recomiendo el siguiente tratamiento de hierbas: Corteza de roble, Pie de león, Centinodia y Salvia, mezclado todo en partes iguales, se ponen a remojo en agua fría durante la noche. Por cada medio litro de agua se toman dos cucharaditas colmadas de la mezcla. Por la mañana se calienta la maceración y se guarda en un termo previamente enjuagado con agua caliente. Durante el día se hacen con esa tisana tibia enjuagues espaciados. También se puede hacer masajes suaves de las encías con la misma tisana y un cepillo de dientes blando.
ATROFIA MUSCULAR
Contra este mal se consiguen muy buenos resultados con los siguientes tratamientos de hierbas: Pan y quesillo recién cogido y lavado se tritura y se mete en una botella que se llena de aguardiente (400). Se deja 10 días en maceración, al sol o cerca de la lumbre. Después se llena para el uso inmediato una botellita pequeña con la tintura y se vuelve a llenar del todo la botella grande de aguardiente. Con la tintura de Pan y quesillo se frotan los músculos enfermos tres veces al día. Por vía interna se toman 4 tazas de infusión de Pie de león a sorbos espaciados durante el día; conviene utilizar la planta fresca (véase »Pan y quesillo« y »Pie de león«).
BOCIO
Frecuentes gargarismos con infusión de hojas de Escrofularia o Galio eliminan el bocio, sea interno o externo. La Escrofularia se cría a orillas de los arroyos y en las partes húmedas de los bosques y matorrales. Tiene el mismo olor fuerte que el Saúco, por lo que no se puede confundir con otra planta. Mientras que de la Escrofularia sólo se utilizan las hojas y se hace gárgaras profundas sin tragar el líquido, del Galio se toma toda la planta con las flores y al hacer gárgaras se bebe de vez en cuando un trago.
Una conocida de Viena tuvo en febrero 1979 un bocio bastante visible. Tenía miedo de dejarse operar y según mi consejo empezó en primavera, al salir los primeros brotes del Galio, a hacer gargarismos con la infusión caliente de la planta. Al año me contó la mujer, llena de alegría, que su marido le había traído siempre la planta recién cogida y desde el principio había notado que el bocio iba disminuyendo hasta que desapareció por completo.
CALCULOS BILIARES
Es curioso saber que de este mal padezcan más las mujeres que los hombres. Los síntomas son eructos amargos, vómitos, fuertes dolores convulsivos que se extienden por debajo de las costillas hasta el corazón y frecuentes vértigos. Teniendo tantos remedios de la botica del Señor a nuestra disposición no es necesario que se tenga que operar siempre. Una cura de 6 semanas con jugo de Rábano se ha demostrado eficaz en cualquier caso, al menos que se trate de piedras insolubles, lo que es muy raro. En este caso hay que operar. El jugo de Rábano se obtiene mediante una licuadora. Se empieza con 100 g., que se toman por la mañana en ayunas, y se va aumentando la dosis a lo largo de tres semanas hasta 400 g.. En las siguientes tres semanas se va disminuyendo la cantidad hasta llegar otra vez a 100 g.. Las personas que tengan inflamaciones del estómago o de los intestinos no deben ingerir jugo de Rábano.
El siguiente episodio demuestra lo rápido que se disuelven los cálculos biliares con el jugo de Rábano. La esposa de un general retirado de Trento se había operado sus cálculos biliares. Eran piedras pequeñas y grandes y a ella le gustaba enseñarlas a todo el mundo. Finalmente las dejó colocar en el mango de un cuchillo. Un día, estando justamente pelando rábanos, vino una visita. La mujer puso el cuchillo donde estaban los rábanos cortados y se ocupó de su huésped. Qué sorprendida se quedó cuando más tarde al coger el cuchillo se dio cuenta de que faltaban las piedras; en la masa de los rábanos se habían disuelto completamente.
He aquí una excelente mezcla de hierbas medicinales que elimina los cólicos y las piedras y se compone de 20 g. de cada una de las plantas siguientes: Pimpinela, Hiedra, Lúpulo, Agrimonia, Menta y Vermut. En un cuarto de litro de sidra se echan tres cucharadas de la mezcla, se pone al fuego y cuando empiece a hervir, se retira y se deja reposar tres minutos. A lo largo del día se va tomando cada hora una cucharada de esta tisana, entre todo unas 8 ó 9 veces. Como se debe tomar caliente hay que guardar la tisana en un termo.
CATARATAS Y GLAUCOMA
El glaucoma no es sólo una enfermedad de los ojos; es sobre todo la consecuencia de un trastorno de los riñones. En la mayoría de los casos va acompañado de reuma y dolores de las articulaciones. De una mezcla de hierbas compuesta de Ortiga, Verónica, Maravilla y Cola de caballo, en partes iguales, se deben tomar diariamente 2 ó 3 tazas de infusión con una cucharadita de Hierbas Suecas, cada una. Para que el tratamiento tenga más efecto, conviene emplear las hierbas recién cogidas. Contra las cataratas se untan varias veces al día los párpados con Hierbas Suecas. Según las cartas que recibo; veo que este tratamiento da muy buenos resultados en las cataratas. Véase más detalles en el capítulo »Celidonia«.
Para combatir el glaucoma es también muy importante tomar un baño de asiento de Cola de caballo. El riñón trastornado ejerce una presión hacia los ojos. Estos baños ayudan a quitar la presión de los ojos; influyen tan favorablemente en los riñones que a veces ya eliminan la presión de los ojos enfermos durante el baño. Se toman 100 g. de hierba desecada o medio cubo (2,5 I.) de hierba fresca. Se deja en maceración durante la noche con agua fría; el agua tiene que cubrir las plantas. Al día siguiente se calienta todo, se cuela y se mezcla la maceración con el agua de baño caliente. Duración del baño: 20 minutos. Conviene añadir agua caliente para que se mantenga todo el tiempo la misma temperatura. El cuarto de baño debe estar a temperatura ambiente. Es importante que el agua cubra los riñones, pero no el corazón. Sin secarse hay que envolverse en un batín y sudar una hora en la cama previamente calentada. Esta agua de baño se utiliza dos veces más, calentándola antes.
Con la siguiente receta se prepara un baño de vapor para los ojos:
20 g. de Eufrasia
20 g. de Valeriana
10 g. de Verbena
30 g. de Flor de Saúco
20 g. de Manzanilla
Se mezcla todo bien. 5 cucharadas rasas se echan en 1/2 I. de vino blanco y se calienta todo hasta que comience a hervir. El vapor se deja actuar sobre los ojos cerrados. — Este vino se guarda en una botella y así se pueden preparar con pequeñas cantidades de él, varios baños de vapor.
Para calmar un poco los dolores de los ojos, se aplica, después de comer, sobre los ojos cerrados un pedazo de algodón mojado con Hierbas Suecas. También se pueden hacer baños de ojos con Eufrasia, pero con una infusión muy ligera. Utilizando una infusión de Eufrasia demasiado cargada, pueden empeorar los ojos. Por cada taza hay que tomar todo lo mas media cucharadita de hierba; se escalda y se reposa brevemente. Yo recomiendo compresas sobre los ojos con esta infusión ligera. Para cada compresa se prepara una infusión nueva que sólo se utiliza una vez.
Después de una peregrinación que se celebró en una iglesia austriaca para peregrinos alemanes, se me acercó una mujer y llena de alegría me contó que, gracias a los consejos de mi folleto, se había curado el glaucoma que tenía.
Otra persona me comunicó también, en una carta, que las mezclas indicadas ayudaron a curar un glaucoma.
CATARRO DEL HENO
Ya que la Ortiga ayuda contra toda clase de alergias, y en el caso de catarro del heno se trata de una alergia, hay que tomar para hacerlo desaparecer en poco tiempo, infusión de Ortiga, 3 ó 4 tazas al día, y tres cucharaditas de Hierbas Suecas, diluidas en la infusión.
CRECIMIENTO DEL CABELLO
Se toma Ortiga, hojas de Nogal, de Abedul y de Saúco (un puñado de cada hierba) y un tallo de Celidonia, y se pone todo con agua fría al fuego. Cuando empiece a hervir, se retira y se deja reposar tres minutos. Con la mitad de este cocimiento y jabón duro se lava la cabeza y se enjuaga con agua clara. La otra mitad de la tisana se deja actuar unos minutos sobre el cabello y el cuero cabelludo sin volver a enjuagar el pelo con agua.
DEBILIDAD DE LA VEJIGA
Cuántas personas sufren de no poder contener la orina, sobre todo los días lluviosos o al andar cuesta abajo. En estos casos ayudan sobre todo baños de asiento calientes con Milenrama y Cola de caballo, 100 g. de hierba por baño (véase en Generalidades »Baños de asiento«). Además hay que tomar diariamente 4 tazas de infusión de Pie de león y para estimular la musculatura desde el exterior, se debe frotar la zona de la vejiga con tintura de Pan y quesillo. El modo de preparación de esta tintura se encuentra en el capítulo »Pan y quesil lo«. También se recomiendan baños de asiento de Pan y quesillo, para el cual se toman igualmente 100 g. de hierba. Muy buenos resultados dan también los baños de asiento con sal. Se echa un puñado de sal en el agua caliente y se repiten los baños cada noche hasta que la debilidad de la vejiga se haya curado.
DESCENSO DEL UTERO
Cuatro tazas de infusión de Pie de león se toman a sorbos espaciadas durante el día. Se prepara escaldando una cucharadita de la hierba con 1/4 de litro de agua hirviendo y dejando reposar brevemente.
Pan y quesillo (tallo, hojas y flores) se tritura y se mete en una botella que se llena después de un aguardiente de 38-40° y se deja macerar 10 días al sol o cerca de la lumbre. Con esta tintura se unta varias veces al día la zona desde la vulva hacia la parte izquierda de la barriga. Además hay que tomar tres baños de asiento de Milenrama por semana: 100 g. de hierba se ponen durante la noche a remojo con agua fría; al día siguiente se calienta y se cuela. El baño debe durar 20 minutos. Después se vuelve a echar el agua del baño sobre las hierbas y se guarda para otros dos baños.
DIABETES
La diabetes es una enfermedad que en nuestros días se ha difundido de tal manera que junto con el infarto de corazón y el cáncer se encuentra entre las primeras enfermedades del mundo. La causa de este mal suele ser la alimentación excesiva e insana de muchas personas, sobre todo de los niños. Así que no sólo los adultos, sino desgraciadamente muchos niños padecen hoy día de afecciones pancreáticas y con ello de la diabetes. Para ellos significa, abstenerse de todos los placeres de la infancia, estar a dieta rigurosa y dejarse inyectar dos veces al día insulina, es decir, tener ya desde la niñez un pie en el sepulcro. El gran número de enfermedades que tenemos hoy demuestra que el bienestar no sienta bien a todos. Tenemos que acortar la ración y evitar una alimentación opulenta. Antes de los días de fiesta, que suelen durar dos días, se puede observar que muchas personas compran tanta comida como si tuvieran que dar de comer a todo un regimiento.
Voy a tratar de describir para todos los diabéticos remedios que fomentan la actividad del páncreas, eliminando así la causa del origen de la diabetes. El gran médico naturista, el Padre Kneipp, dice: »La diabetes se cura bastante rápido con las siguientes plantas medicinales: 3 partes de Cariofilada (Geunn alpina), 1 parte de hojas de Zarza, 1 parte de hojas de Arándano, 3 partes de Cincoenrama (Potentila aurea), 2 partes de vainas de Judía, verdes y descadas.« De esta mezcla se toma una cucharadita colmada por cada 1/4 I. de agua hirviendo, se escalda y se deja reposar tres minutos; cantidad diaria: de 1 1/2 litros a 2 litros.
El efecto terapéutico de las hojas de Arándano depende mucho de la correcta recolección. Sólo se deben coger antes de la maduración del fruto. En este estadio son un medicamento clínicamente probado contra la diabetes. Es un hecho comprobado, que la mirtilina contenida en la hoja antes de la maduración del fruto, no sólo reduce el índice elevado del azúcar, sino que logra curar del todo la enfermedad. A la mirtilina de las hojas de Arándano se le ha dado con razón el nombre de »insulina vegetal«. A pesar de las virtudes excelentes de las hojas de Arándano, cada tratamiento con esta infusión debe hacerse bajo control médico. Siempre hay que consultar al médico en estos casos.
También se recomienda el Apio para rebajar el azúcar, así como el jugo de Choucroute (col fermentada) crudo, que figura entre las antiguas medicaciones naturistas. Igualmente contribuyen a disminuir el azúcar las zanahorias crudas, las cebollas y los ajos, comiéndolos cada día crudos.
Otro remedio casero: 4 cucharadas de hojas de Arándano (cogidas antes de la maduración del fruto) se ponen al fuego con 2 litros de agua fría y se hierve todo hasta que sólo quede la mitad del líquido. De este cocimiento se toman tres tazas al día.
Las Ortigas también influyen favorablemente sobre el páncreas, por lo que rebajan el azúcar. En este caso se administra el extracto de Ortiga que venden en las farmacias y droguerías homeopáticas y en las tiendas de productos dietéticos.
Siendo el Cálamo aromático un buen remedio contra casi todas las afecciones pancreáticas, ayuda también a curar la diabetes.
Se pone a macerar durante la noche una cucharadita rasa de raíz de Cálamo con agua fría, se calienta ligeramente al día siguiente y se cuela. Hay que beber un trago antes y otro después de cada comida, es decir, 6 tragos al día. Cada diabético podrá comprobar el buen efecto de esos seis tragos.
Las hojas y los brotes del Saúco, en forma de infusión, también se recomiendan para combatir la diabetes. El Saúco pertenece a las hierbas medicinales más antiguas de la Medicina popular.
A principios de la primavera, cuando empieza a aparecer en los prados y campos el Diente de león, conviene recolectar la planta cortándola a flor de la raíz, para comerla, bien lavada, como ensalada. Hay dos variedades, una con el brote verde y otra con las hojitas amarillentas y lechosas. Esta última sabe mejor y es más tierna. Los diabéticos deberían comer en primavera diariamente esta ensalada de Diente de león, a mediodía y con la cena. Cuando a finales de abril y a principios de mayo la planta está en plena floración, ha llegado para el diabético el momento de reducir el azúcar con una cura de cuatro semanas. Se coge la flor con todo el tallo; éste se lava y después se quita la flor. Comiendo cada día de 10 a 15 tallos de Diente de león, se puede llegar a una normalización total del nivel de azúcar en la sangre. Los bohordos tienen al principio un gusto amargo que se pierde después.
El Muérdago actúa asimismo favorablemente sobre el páncreas; tomándolo continuamente se pierde la causa del origen de la diabetes. Esta planta se administra en forma de maceración, dejándola a remojo durante la noche con agua fría (una cucharadita colmada por taza). Se empieza la cura con 3 tazas diarias. Después de una semana se toman sólo dos y más tarde una taza. Este tratamiento se interrumpe en primavera, cuando se obtengan verduras frescas para el diabético. El Muérdago sólo conserva sus virtudes curativas si se recolecta desde principios de octubre hasta principios de diciembre y en los meses de marzo y abril. Las plantas más eficaces son las que crecen sobre los robles y los álamos, pero también sirven las de abetos y árboles frutales. Se cortan las hojas y los tallos a pedacitos. Las bayas blancas no deben utilizarse para la maceración.
Siendo así que nuestras famosas Hierbas Suecas estimulan el páncreas e incluso lo curan, se recomiendan también contra la diabetes. Hay que tomarlas tres veces al día, cada vez una cucharadita diluida en un poco de tisana. Las virtudes poderosas de las Hierbas curativas se harán notar también favorablemente en una compresa empapada, aplicada una vez al mes, durante cuatro horas, sobre el páncreas.
La raiz de Achicoria reprensenta la mejor verdura dietética para el diabético. Se enjuaga las raíces varias veces con agua, como se hace también con la endivia para reducir el sabor amargo. Cabe decir que la infusión de flores y tallos de Achicoria se utiliza con mucho éxito contra la obesidad, bebiendo cada día dos tazas de infusión.
El jugo fresco de Pepino recién cogido rebaja el azúcar en la sangre, por lo que se recomienda también. La Escorzonera es asimismo una hortaliza dietética, al igual que el Espárrago, por el escaso contenido en féculas. El diabético puede comer tranquilamente estas dos verduras, preparadas con materia grasa o como sea, sin que le hagan daño. Esta variedad de Escorzonera comestible se cultiva en los huertos. El Puerro verde es también muy bueno para las personas diabéticas. Se come crudo con todas las hojas verdes, cortado a rodajas, para la cena, con pan, o a mediodía en forma de ensalada.
Una bebida sabrosa y sana se prepara de la siguiente manera: 1/2 kilo de Puerro cortado a trocitos con todas las hojas verdes se mezcla con 0.7 I. de vino blanco seco, se tapa y se deja reposar 24 horas. Después de colarlo se guarda en una botella y se bebe cada día un trago por la mañana y otro por la noche. Los residuos se pueden comer con pan.
Un médico de Alta Austria curó a una diabética empleando la siguiente receta: Tres cabezas grandes de ajo se machacan y se meten en una botella de un litro que se termina de llenar con un buen aguardiente; se deja de 10 a 15 días en maceración y se toma cada día en ayunas una cucharadita.
En abril 1977 recibí un llamada telefónica de una mujer de Viena, diciéndome que padecía desde hacía 30 años de diabetes y me rogaba que le ayudara. Le recomendé los tratamientos de hierbas arriba indicados. La mujer siguió mis consejos según el folleto. A principios de agosto me comunicó contentísima que según el análisis de laboratorio, el nivel de azúcar en la sangre se había normalizado. A finales de septiembre 1977 di una conferencia en la parroquia Hasenleiten en Viena. Durante la conferencia esta misma mujer pidió la palabra y dijo: »Yo había estado 30 años enferma de diabetes. Este año he seguido los consejos de la señora Treben y desde agosto estoy curada.« Los oyentes le aplaudieron frenéticamente.
Una señora de Baviera escribe diciendo: »Un conocido mío estaba desde hacía muchos años enfermo de diabetes y necesitaba cada día inyecciones. Por fin, gracias a las infusiones y plantas de su folleto, ha conseguido rebajar el azúcar. Se sobreentiede que el enfermo está constantemente bajo control médico. El médico se quedó sorprendido al ver cómo bajaba el azúcar.«
Un ingeniero de Viena que tenía un indice de 280 de glucosa, siguió los consejos indicados en la »Botica del Señor«. Más tarde se constató en un control médico que el azúcar había disminuido a un índice de 130.
Es evidente que el uso de todas estas hierbas medicinales y verduras dietéticas sólo tendrá éxito si el enfermo se atiene rigurosamente a la dieta para diabeticos.
DOLOR DEL MIEMBRO FANTASMA (amputaciones)
Después de una amputación se presentan a veces dolores muy fuertes del miembro fantasma que duran a veces muchos años. Según la experiencia, las cataplasmas de Consuelda (véase »Consuelda«, Modos de preparación) calman los dolores y los hacen desaparecer con el tiempo.
Igualmente se emplea con mucho éxito una esencia de cebolla que se consigue en las farmacias homeopáticas o en las tiendas de productos de régimen. Pero también se puede preparar fácilmente por uno mismo. Se llena una botella hasta el gollete con cebollas cortadas a rodajas y se cubre de un aguardiente de 38-40°. Se deja macerar durante 10 días al sol o cerca de la lumbre y después se cuela y se guarda la tintura en botellas. Con esta tintura se unta e! muñón.
Un buen remedio representa la maceración de las raíces del Lirio cárdeno, que se desentierran en octubre, se lavan bien con un cepillo y se secan colgadas de un hilo. Las raíces desecadas se pulverizan. Media cucharadita de ese polvo se macera durante la noche con 1/4 I. de agua; se beben a lo largo del día una o dos tazas a sorbos espaciados.
Los muñones se deberían bañar una vez por semana en un baño de Serpol que se prepara con un puñado de hierba; cada baño se puede utilizar tres veces. También se recomiendan almohadillas de Serpol y Licopodio que se aplican durante la noche. Para ello se llena un saquito de tela con 100 ó 150 g. de la respectiva hierba.
DOLOR DE OIDO DEBIDO A RESFRIADOS
Se mezclan Hiedra terrestre, Salvia y Milenrama en partes iguales. Con la infusión caliente de estas hierbas se enjuaga repetidas veces el oído. También se recomiendan gotas de Hierbas Suecas, introducidas en el oído mediante un taponcito de algodón, habiendo untado antes el conducto auditivo con aceite de Serpol templado. Para calentar el aceite se mete una cucharita en agua caliente y después se echan una gotas de aceite en la cucharita.
EDEMAS
Dos cucharaditas de raíz de Gatuña triturada se ponen a remojo durante la noche con una taza de agua fría. Por la mañana se calienta todo ligeramente y se cuela. De esa taza de maceración se toma la mitad media hora antes del desayuno y la otra mitad media hora después.
Otra posibilidad de suprimir los edemas es tomando una maceración de raíz de Saúco. Se toma por taza una cucharadita rasa (cantidades mayores pueden provocar diarreas y vómitos) y se pone a remojo durante la noche. Por la mañana se le puede añadir media taza de agua. Calentada ligeramente, se toma de esta maceración media taza después de cada una de las tres comidas principales.
CONSEJOS PARA CURAR DIVERSAS ENFERMEDADES
ENFERMEDAD DE PARKINSON
Las hojas frescas de Aleluya, que cubren a modo de un tapiz el suelo de los bosques de las regiones nórdicas, se lavan y se les extrae el jugo mediante una licuadora. Cada hora se toman de a a 5 goras diluidas en infusión de Milenrama, de la cual se preparan cuatro o cinco tazas al día. Para obtener una taza de infusión de Milenrama se escalda una cucharadita repleta de flores de Milenrama y se deja reposar brevemente. Las gotas de Aleluya se deben diluir por lo menos en la triple cantidad de líquido. Al mismo tiempo se hacen fricciones en la espina dorsal con el jugo fresco de Aleluya y tintura de Milenrama, alternativamente. (Preparación de la tintura de Milenrama: Las flores cogidas al sol de mediodía se cubren de un aguardiente de 38-40° y se dejan macerar 15 días al sol) Durante el día se aplica sobre el cogote una compresa de Hierbas Suecas, de duración de cuatro horas (véase el capítulo »Hierbas Suecas«). Estas compresas no obligan al enfermo a permanecer inmóvil. Si aparte de los temblores se presenta una cierta rigidez de los miembros, hay que hacer baños completos de Serpol con 200 g. de hierba. Un baño se puede utilizar tres veces, volviéndolo a calentar (véase en Generalidades »Baños de cuerpo«).
ENFISEMA PULMONAR
El enfisema pulmonar, así como el asma cardiaco y las afecciones del tiroides, que van acompañados de disnea, se deben en gran parte a un hígado trastornado. La opresión del hígado hacia arriba contribuye a que los bronquios, el pulmón y el corazón empiecen a hincharse y aumenten de volumen. La continua opresión del hígado sobre el tiroides delicado provoca mutaciones patológicas. En estos casos se bebe diariamente, por la mañana una taza de infusión de Licopodio; de día se aplica durante 4 horas una compresa de Hierbas Suecas (véase en »Hierbas Suecas«, Modos de empleo) y de noche, en cambio, cataplasmas al vapor de Cola de caballo. Un puñado de Cola de caballo se reblandece al vapor de agua hirviendo, se envuelve bien caliente en un lienzo y se aplica sobre el hígado enfermo. De este modo se disminuirá la opresión del hígado y poco a poco desaparecerá la angustiosa disnea.
ERISIPELA
Las hojas frescas de Tusílago se lavan, se machacan en el mortero y se aplican a las partes inflamadas del cuerpo. También puede prepararse una infusión de estas hojas (las hojas cortadas se escaldan con agua hirviendo y se deja reposar un poco) que se deja enfriar y se emplea para hacer compresas.
Asimismo se aplican hojas de repollo o col rizada, lavadas y machacadas. Quitan todas las inflamaciones de la erisipela. Un tratamiento muy suave y eficaz es el de Siempreviva. Con el jugo de esta hierba, obtenido mediante una licuadora, se unta ligeramente las zonas de la piel inflamadas. En uso interno se toma diariamente, media hora antes del desayuno, una taza de infusión de Verónica y a lo largo del día 3 ó 4 tazas de infusión de Ortiga, hasta que el médico constate que la enfermedad está en vía de curación.
ESCLEROSIS MULTIPLE
Incluso contra esta enfermedad que se tiene por incurable, hay remedios en la botica del Señor. Claro que en este caso la curación avanza lentamente, pero no hay que perder el ánimo, ni tampoco la fe y la confianza en las hierbas medicinales, este don que el Creador ha puesto a disposición de todos los enfermos. Quisiera volver a subrayar que en las enfermedades graves hay que procurar utilizar las hierbas recién cogidas. Sólo se desecan para que no nos falten en invierno.
Pan y quesillo lavado y triturado se mete en una botella que se llena hasta el cuello y se cubre todo de un aguardiente de 38-40°. Después se deja macerar diez días al sol o cerca de la lumbre. Con esta tintura se frotan dos o tres veces al día las zonas musculares afectadas. En uso interno se toman 4 tazas de infusión de Pie de león y dos tazas de infusión de Salvia distribuidas a sorbos espaciados durante el día. También se lavan hojas frescas de Aleuya y se les extrae el jugo mediante una licuadora. Seis veces al día, con intervalos de una hora, se toman de 3 a 5 gotas diluidas en infusión. Conviene asimismo untar las partes enfermas del cuerpo con aceite de Hipérico, Manzanilla y Serpol que se preparan llenando una botella con las flores cogidas a pleno sol y cubriéndolas con aceite de oliva virgen (el aceite debe sobrepasar el nivel de las hierbas); después se deja 10 días al sol o en un lugar cálido.
De las flores de Hipérico, Manzanilla y Milenrama cogidas a pleno sol se preparan tinturas del mismo modo como la de Pan y quesillo. Con estas tinturas se frota la espina dorsal, las articulaciones y la cadera. Asimismo recomiendo para fricciones la tintura de raíz de Consuelda, que se prepara con una botella llena de raíces frescas bien lavadas y trituradas, cubiertas de un aguardiente de 40°. Si la columna vertebral está rígida, se aplica sobre la región lumbar cataplasmas calientes de raíz de Consuelda. Las raíces desecadas se muelen finamente y añadiéndole agua caliente se prepara a modo de una papilla; ésta se aplica mejor al lienzo si se le mezclan unas gotas de aceite. Además se bebe por la mañana y por la noche cada vez una taza de infusión de Milenrama y se toman 3 cucharadas soperas de Hierbas Secas diluidas en tisana que se van bebiendo a sorbos espaciados distribuidos a lo largo del día. También hay que aplicar varias veces compresas de Hierbas Suecas (4 horas) sobre el cogote.
No hay que olvidar los baños de asiento de yemas de Abeto, Hipérico, Manzanilla, Salvia, Milenrama, Serpol y Cola de caballo, ya que todas estas hierbas dan buenos resultados en las parálisis. Por baño se toman 100 g. de hierba que se pone en remojo en agua fría toda la noche; al día siguiente se caliente todo, se cuela y se mezcla con el agua del baño. El baño debe cubrir los riñones; después de 20 minutos de baño se debe sudar una hora en la cama. Este baño se puede utilizar otras dos veces; se vuelve a mezclar con las hierbas y se calienta antes de cada uso. No conviene emplear más que una clase de hierba por semana. Muy aconsejables son los baños completos de Serpol, que influyen favorablemente sobre los músculos y los tejidos; pero también recomiendo los de Ortiga por su virtud estimulante de la circulación de la sangre. Se necesitan 200 g. por baño que se prepara como los baños de asiento. Aquí también se puede utilizar el mismo baño tres veces. El agua no debe cubrir el corazón.
Recientemente he obtenido muy buenos resultados con cataplasmas de Pánace heraclio aplicadas sobre todo el cuerpo. Las hojas frescas de esta planta (que se consideran como el mejor forraje para los conejos) se lavan, se machacan y se aplican sobre una sábana con la cual se envuelve el enfermo y se cubre bien con una toalla grande para que se mantenga caliente y se deja actuar toda la noche esta hierba medicinal. Si el enfermo está intranquilo o si se presentan revulsiones en partes delicadas, se interrumpe el tratamiento. Normalmente nota el enfermo las virtudes curativas de las hojas de Pánace heraclio y se duerme tranquilamente. En muchos casos este tratamiento ha traído consigo una mejora notable.
Quisiera mencionar otro remedio que también ha dado muy buenos resultados en la esclerosis múltiple. Se trata de la leche de yegua, como alimento dietético para los afectados de esta enfermedad »incurable«. Como en nuestros días la gente se dedica de nuevo a la cría de caballos, no debe ser tan difícil conseguir la leche de yegua. Una conocida mía me escribió que leyó años atrás que un viejo pastor curó con leche de yegua a toda una serie de enfermos que se tenían por incurables.
A continuación les doy un informe de una enferma de esclerosis múltiple con afecciones de la vejiga y del bajo vientre: »He seguido diariamente sus consejos haciendo por la noche fricciones con tintura de Milenrama en la espalda, frotándome por la mañana y por la noche las piernas con tintura de Pan y quesillo y aplicando compresas de Hierbas Suecas sobre el bajo vientre. También tomo por la mañana en ayunas, media hora antes del desayuno, infusión de Epilobio con gotas de Hierbas Suecas. Ahora, al cabo de cuatro meses, puedo afirmar que sus consejos son muy buenos y que el tratamiento con las hierbas medicinales empieza a rendir efecto. Los terribles espasmos de las piernas se están relajando poco a poco y ya no duelen tanto. Hay días que ya puedo andar un poco en casa sin tener que apoyarme en los muebles o paredes. La vejiga ha vuelto a funcionar normalmente. La regla se presenta cada 3 ó 4 semanas y dura sólo 3 ó 4 días. Es un éxito para mí, aunque sólo sea pequeño. La esclerosis múltiple es una enfermedad muy pertinaz con muchas complicaciones. Las Hierbas Suecas las tomo cada día en pequeñas cantidades con infusión de Ortiga, Milenrama y Pie de león. Con la Celidonia he tenido buenas experiencias. Debajo del ojo izquierdo tenía durante muchos años una costra gruesa que iba acercándose siempre más hacia el ojo. Usaba varios medicamentos que me daba el médico, pero nada ayudaba. Por fin probé con Celidonia (10 días en maceración con aguardiente) y ya casi no se ve la costra. Me alegro mucho sobre cada éxito, aunque sea pequeño, porque me sirve cada día de estímulo para continuar. Ya tengo muchas hierbas preparadas para el invierno.
Sobre los discos intervertebrales leí en un libro médico de mis padres: Se rallan tubérculos de Peonía y con el cocimiento se toman baños. Parece que la Peonia es buena para la médula y el cerebro. Yo tomé dos baños con ese cocimiento. También preparé una tintura con estos tubérculos y aguardiente y eché un poco en el baño. Me bañé 20 minutos. Al día siguiente ya no me dolían los discos intervertebrales. Esto sucedió hace tres semanas y los dolores no se han repetido. «
Durante una conferencia que di en Rendsburg/RFA subió una mujer al estrado y contó que tres años atrás aún estaba en la silla de ruedas. Desde que sigue las indicaciones del folleto »Salud de la botica del Señor« su estado de salud ha mejorado tanto que ya puede andar normalmente y se siente como una persona sana. No tenía la oportunidad de recolectar ella misma las plantas en el campo y las compraba desecadas en la herboristería. La admiración por el esfuerzo realizado y por la paciencia que tuvo, motivó entusiastos aplausos del público.
Los niños mongoloídes o espásticos, o bien los niños impedidos se someten a los tratamientos de hierbas expuestos bajo atrofia muscular y esclerosis múltiple. Las fricciones con las tinturas indicadas y sobre todo los baños de hierbas revivificantes nunca podrán recomendarse suficientemente. En muchos casos de niños espásticos, la enfermedad tiene su origen en el comportamiento de la madre durante el embarazo; en este período conviene abstenerse del consumo de tabaco, alcohol, drogas pero también del café. — Niños con trastornos del lenguaje también se deberían tratar del modo arriba indicado. — En los cuatro casos mencionados es muy importante que se apliquen sobre el cogote compresas de Hierbas Suecas (véase el capítulo »Hierbas Suecas«).
ESTREÑIMIENTO
Un médico dijo una vez en una conferencia que estuve escuchando en una residencia de ancianos: »Cuanto más se acostumbren a tomar laxantes, más pertinaz será su estreñimiento.« Además se sutilizan los intestinos a causa de la constante reducción de la mucosa.
Trate de normalizar su digestión tomando con cada comida tres cucharadas de Linaza con un poco de líquido. Higos y ciruelas que se ponen a remojo durante la noche y se comen, previamente calentados, por la mañana en ayunas o en vez del desayuno también son muy eficaces. Si se dispone de agua de manaNtial fresca, basta tomar por la mañana un vaso en ayunas. Muy buenos resultados da la infusión de Achicoria que tomando media o una taza en ayunas cura incluso los casos más pertinaces.
No quiero dejar de mencionar esta carta que recibí desde Baviera: »Su consejo de tomar infusión de Achicoria y Pan de higos ha actuado tan favorablemente sobre los intestinos de mi madre, que después de veinte años de problemas, se le ha normalizado la digestión y la evacuación. Ella ya se había hecho con la idea de que nadie ni nada le podría ayudar. «
Receta para el Pan de higos: Se lavan medio kilo de higos secos, se muelen en una máquina de picar carne; después se amasa todo mezclándole 5 g. de hojas de Sen. Se forma a modo de chorizos que se envuelven en papel de estaño y se guardan en la nevera. Cada mañana se come en ayunas un trocito del tamaño de una avellana (niños toman la tercera parte) hasta que la digestión se haya normalizado.
He aquí otro consejo: Hagan cada día ejercicio al aire libre. Cambien su alimentación e incluyan en su dieta fruta, verduras y cereales integrales.
Ahora quisiera contarles cómo me convencí de que la Achicoria ayuda en los casos de estreñimiento. La Achicoria me hace recordar mis años de infancia y juventud. A orillas de todos los caminos nos llamaban la atención y nos emocionaban las estrellitas azules de esta planta. Aquí en Alta Austria la echo mucho de menos; se encuentra raras veces. Por eso me causó alegría al ver un día en los entornos de una casa recién edificada delante de mi casa una planta de Achicoria con seis flores. Me detuve ante ella y al verla toda llena de polvo pensé: »A pesar de tu estado deplorable me llevo tus seis flores.« Cada día suelo hacer para mi familia y para mí, seis tazas de infusión de hierbas medicinales, así que al día siguiente puse en la mezcla esas seis flores de Achicoria. Con eso mi taza contenía la esencia de una flor. La taza de infusión que tomé aquella mañana provocó después de cada comida, es decir, tres veces al día, una evacuación normal y abundante. Ese hecho no me dejó en paz hasta que encontré en un viejo herbario la explicación: La Achicoria combate eficazmente la obesidad. Me parece que un tratamiento con Achicoria, que provoca evacuaciones abundantes y normales, sería la mejor solución para que las personas con exceso de peso adelgazaran.
FIMOSIS
Según el Dr. Dirk Arntzen de Berlín, hay un método para curar con baños la fimosis en los niños. Se prepara un baño con 50 — 70 litros de agua caliente con 10 — 20 ml. de una solución al 10% de Sulfato de Potasio (preferentemente recién preparado en la farmacia);durante el baño se retira el prepucio. A veces ya se aprecia el efecto después del cuarto baño; pero más de diez baños no tienen sentido. La edad más adecuada parece ser entre los 4 y 7 años de edad; pero también se pueden curar niños hasta los diez años. Con este tratamiento se ha podido evitar la operación en muchos chiquillos. Desgraciadamente en los mayores este método no tiene éxito. También ayudan baños de Malva. Para los niños se toma un puñado de Malva que se prepara en frío, dejando la hierba a remojo durante la noche. Los mayores necesitan unos 100 g. de hierba por cada baño de asiento.
FISTULAS
Se toman en uso interno tres veces al día una cucharadita de Hierbas Suecas (en casos muy graves cada vez una cucharada sopera) diluidas en infusión de Manzanilla sin azúcar. En uso externo se hacen lavados con una mezcla de tisana compuesta de Hiedra terrestre, Cola de caballo y Linaria vulgaris, en partes iguales. Después de los lavados se untan las fístulas con gotas de Hierbas Suecas o se aplica un algodón empapado con estas gotas. También se recomiendan baños de asiento de Cola de caballo y cataplasmas al vapor de Cola de caballo (véase en »Cola de caballo«).
Una mujer de Baviera de 51 años de edad padecía desde hacía 28 años de una fístula en el pómulo. Me comunicó lo siguiente: »No puedo describir todo lo que he sufrido esos 28 años. Me aconsejaban que me hiciera operar pero no lo consentí, ya que el profesor tenía dudas sobre el resultado de una intervención quirúrgica. Entonces fuí a la consulta de un médico naturista que me ordenó un régimen de crudos y una cura de respiración terapéutica, lo cual me alivió mucho pero no me curó. Por fin empecé en primavera a coger los primeros brotes de Ortiga y a tomar diariamente tres tazas de la infusión, cada taza con una cucharadita de Hierbas Suecas. A los 15 días se curó mi fístula y todos los dolores habían desaparecido. Para mí y para todos los que me conocían fué como un milagro.«
GUSANOS
Desde tiempos remotos se sabe que las semillas de calabaza son un remedio contra los gusanos. A los niños se les da contra los oxiuros diariamente de 10 a 15 pepitas peladas, a los mayores de 20 a 30; la pielecita fina no se quita y hay que masticarlas bien. Una hora después se toma una cucharadita de aceite ricino. También se recomiendan las pepitas para facilitar la expulsión de la solitaria. Siguiendo un régimen riguroso se comen 80-100 pepitas (sin quitar la pielecita), distribuidas en cuatro raciones y masticándolas bien. Media hora después se toma cada vez media cucharadita de aceite de ricino. Si es necesario se puede repetir la cura ya que no causa ningún daño.
Los ascarides se combaten con un viejo remedio casero, zanahorias y remolacha roja. También ayuda el jugo crudo de Choucroute, así como el Rábano rústico, la Cebolla y el Ajo hervido con leche.
HEMOFILIA
Contra este mal que, gracias a Dios, es muy raro, ayuda el siguiente tratamiento de hierbas: Verónica, Pie de león, Pan y quesillo, Milenrama y Cola de caballo, mezclado en partes iguales. De la infusión hay que tomar diariamente por lo menos cuatro tazas distribuidas durante el día. Se prepara con 1/4 I. de agua hirviendo y una cucharadita colmada de hierba, que se escalda y se deja reposar un minuto. Además se hacen cada 15 días baños de asiento a temperatura agradable a base de las hierbas indicadas. Duración del baño: 20 minutos. El baño se puede utilizar dos veces más, volviendo a mezclarlo con las hierbas y calentándolo cada vez.
HERPES ZOSTER
El jugo suave de Siempreviva mayor (Sempervivum tectorum) calma rápidamente los dolores profundos del Herpes zoster. Se cortan a lo largo unas cuatro o cinco de las hojas carnosas y se ponen en un plato. Con el jugo que aparece en la superficie se untan varias veces al día las partes enfermas del cuerpo. También se puede extraer el jugo mediante una licuadora. El enfermo notará desde la primera aplicación un gran alivio. En un antiguo herbario se encuentra la siguiente receta:
25 g. de corteza de Roble 10 g. de Pie de león
25 g. de Avena
10 g. de Manzanilla
25 g. de Salvia
10 g. de Meliloto
Un litro de agua fría se pone al fuego con cuatro cucharadas de la mezcla; cuando arranca la ebullición se retira del fuego y se deja reposar tres minutos. Con el cocimiento tibio se unta repetidas veces al día suavemente las partes enfermas. Los residuos se aplican durante la noche, calentados ligeramente y envueltos en un lienzo, sobre las zonas afectadas de la piel.
HIPO
La infusión de frutos de Eneldo es un remedio agradable y muy eficaz contra el hipo. Se toma una cucharadita de los frutos por 1/4 I. de agua hirviendo, que se escalda y se deja reposar brevemente. No se endulza.
INAPETENCIA EN LOS NIÑOS
Una madre joven se quejaba de que su hijo de dos años padecía de inapetencia crónica, estaba siempre cansado y desanimado, costaba mucho sacarlo de casa para dar paseos y tenía, muchas ojeras. Esto cambió de la noche a la mañana cuando, según mi consejo lo metió en un baño de cuerpo de Serpol, preparado con 50 g. de hierba. (Se deja el Serpol toda la noche a remojo en agua fría; el baño dura veinte minutos y no debe cubrir el corazón; el mismo baño se puede utilizar dos veces más, volviéndolo a mezclar con las hierbas). Aparte de los baños, el niño tomaba cada día una taza de infusión de Ortiga a sorbos espaciados. La madre me contó llena de alegría, que su hijo había cambiado completamente. El apetito iba aumentando y le gustaba mucho estar fuera e ir de paseo. Dijo que era divertido ver como el niño recordaba a su madre que no olvidara la tisana de Ortiga y solía decir »sólo un trago«.
IRRITACION DEL APENDICE
»Si se bebiera de vez en cuando una taza de infusión de hojas de Zarza frescas, jamás se presentaría una irritación del apéndice«. Esta frase, dicha por un médico de cabecera de mi infancia, me vino a la memoria cuando un día se despertó mi hijo de siete años todo pálido y con dolores en la zona del apéndice. Llamé al médico y enseguida preparé la infusión de Zarza. Mientras el niño bebía la infusión le volvían los colores de cara. El médico ya no pudo constatar ninguna irritación del apéndice.
LAGRIMEO EXCESIVO
Para combatir este mal tan penoso se mezclan 10 g. de Eufrasia, 10 g. de Valeriana, 15 g. de raíz de Cardo santo,10 g. de flores de Lila, 15 g. de Pie de león, 20 g. de Manzanilla y 10 g. de Ruda. Por cada medio litro de agua se toma 15 g. de hierba que se pone a remojo durante la noche y se calienta al día siguiente hasta que arranca el hervor. Después se remueve todo, se retira del fuego y se deja reposar tres minutos. Se deja enfriar un poco y después se aplican sobre los ojos cerrados unos trocitos de tela empapados con la tisana todavía un poco caliente. Se dejan actuar durante media hora y se repite varias veces. Después se cubren los ojos con un paño seco y se reposan.
LESIONES DE LA ESPINA DORSAL
En este caso, la pomada de Galio da resultados extraordinarios. Esta se prepara al igual que la pomada de Maravilla (véase en »Maravilla«). La pomada se aplica desde abajo hacia arriba a lo largo de la columna vertebral. Es muy importante hacer también fricciones con tintura de Milenrama y de raíces de Consuela (véase en Generalidades »Tinturas«) y de tomar aparte baños completos de Serpol y Milenrama (véase en Generalidades »Baños completos«).
MAL OLOR DE LA BOCA — LENGUA SUCIA
El mal olor de la boca no sólo es desagradable para uno mismo sino también para los que le rodean. En primer lugar el médico debe diagnosticar el origen del mal olor. Puede tener diferentes causas: Dientes malos, que hay que curar, úlceras de la boca, anginas, supuración de la mucosa nasal, pero también por trastornos del estómago, por falta de ácido gástrico o por estreñimiento. En este último caso hay que hacer lo necesario para conseguir una digestión normal.
Las úlceras de la boca se combaten con gargarismos de infusión de Galio caliente y las anginas con gárgaras de infusión de Salvia. Contra la supuración de la mucosa nasal se inhala por la nariz infusión de Salvia templada. En muchos casos se elimina el mal olor de la boca con unas gotas de aceite de Enebro que se diluye en un vaso de agua tibia y se bebe a sorbos espaciados. También ayudan a veces las semillas de Eneldo masticándolas lentamente. Si el mal olor de la boca se debe a afecciones de la cavidad bucal es muy indicado hacer repetidas veces gárgaras con 30-40 gotas de tintura de Mirra diluidas en agua tibia. La infusión de Ajenjo es un remedio excelente contra la lengua sucia y el mal olor de la boca. No es verdad lo que creen muchos de que el Ajenjo es sano y no puede hacer daño. No hay que abusar. Se toma sólo media cucharadita todo lo más por cada taza.
MALOS RESULTADOS EN EL COLEGIO (en niños)
Una madre me contó desesperada que su hijo de 10 años no tenía ningún interés en el colegio; los maestros le habían advertido que el chico no seguía lo que se explicaba en clase y que no sabían qué hacer con él. El niño, que antes apenas había estado enfermo y había hecho mucho deporte, estaba ahora siempre muy pálido y tenía ojeras muy marcadas. Según mi opinión estaba malo, por lo cual le aconsejé a la madre que le diera diariamente dos tazas de infusión de Ortiga fresca con una cucharadita de Hierbas Suecas por taza. En el corto plazo de seis semanas hubo varias sorpresas por parte de los maestros, de los padres y del chiquillo mismo. Este empezó a sacar buenas notas y los buenos resultados que obtuvo tan repentinamente le estimularon a seguir mejorando siempre más en el colegio.
Los fallos en la escuela no se deben siempre a la pereza del niño, sino que pueden estar motivados por trastornos orgánicos durante el crecimiento, como se ve en este caso. Aquí han ayudado rápidamente las más modestas hierbas medicinales.
MENSTRUACION EXCESIVA
En el caso de menstruaciones excesivas se toma por la mañana, media hora antes del desayuno, una taza de infusión de las siguientes hierbas bien mezcladas: 25 g. de flor de Árnica, 50 g. de raíz de Valeriana, 25 g. de Liquen de Islandia, 25 g. de Toronjil, 25 g. de Milenrama y 25 g. de Salvia. Se toma una cucharadita colmada de la hierba, se escalda con 1/4 I. de agua hirviendo y se deja reposar tres minutos. Se debe seguir tomando la infusión aun cuando las reglas se hayan normalizado. Estas hierbas actúan favorablemente sobre el bajo vientre y previenen los trastornos de la menopausia. Su efecto se deja sentir durante muchos años.
Hace algunos años una mujer joven me pidió esta receta. Padecía de menstruacioes increíblemente abundantes y la habían operado dos veces en la clínica de su hermano que era ginecólogo; pero todo fue en vano. La infusión arriba indicada le ayudó tan rápidamente como a mí cuando después de un tifus muy grave las menstruaciones duraban mucho y no se podían contener con nada. Entonces mi médico tuvo la idea de probar un tratamiento con hierbas. Así llegó esta receta tan maravillosa a mis manos. Más de un año y medio había sufrido de menstruaciones que a veces duraban quince días. Las infusiones de hierbas me ayudaron exactamente a las 4 semanas de tomarlas y normalizaron mi menstruación. Seguir tomando esta tisana durante cinco años sin interrupción.
NEURALGIA FACIAL
Flores de Manzanilla, Gordolobo, Milenrama y Serpol cogidas a pleno sol se meten frescas o ligeramente desecadas en un saquito de tela, que se aplica a la parte dolorida de la cara. Es importante que se cojan las flores cuando el sol esté en lo alto, porque es cuando la planta produce el máximo de aceites etéreos, los cuales tienen tan buenas virtudes curativas.
Además se toman diariamente cuatro tazas de infusión de las plantas indicadas, a sorbos espaciados. La hierba se escalda y se deja reposar brevemente. Si se presentan dolores espasmódicos, se lava la cara con una infusión tibia de Ortiga, se frota la misma y se aplica una almohadilla de Licopodio. —También se recomiendan compresas faciales de Hierbas Suecas, que se aplican estando acostado. Tres cucharaditas diarias de Hierbas Suecas diluidas en la infusión arriba indicada también dan alivio.
OSTEOPOROSIS
La semilla molida de Alholva (harina de Alholva) da muy buenos resultados en el tratamiento de la osteoporosis, así como en los tumores de los huesos y las inflamaciones de la médula ósea. Se toman cuatro veces al día, cada vez media taza de infusión de Milenrama. Dos de estas medias tazas de infusión se mezclan cada una con media cucharadita de harina de Alholva. También se toma una vez al mes un baño de cuerpo de Milenrama preparado con 200 g. de hierba (duración del baño veinte minutos). El baño no debe cubrir el corazón. Además conviene untar el cuerpo cada día con tintura de Milenrama. Las flores de Milenrama cogidas al sol se meten en una botella y se cubren de aguardiente de 38-40°; se macera diez días al sol.
PANADIZO
Se hacen varias veces al día durante media hora baños calientes de infusión de Manzanilla. Después conviene aplicar un ungüento emoliente (contra los abscesos) y un vendaje de arcilla. A continuación un antiguo remedio casero: »Se hierve ajo con leche y en este líquido se baña la mano durante media hora«. Si se forma pus en el dedo se aplica una cataplasma de Linaza molida y después de abrirse el tumor se hacen baños de Manzanilla. Finalmente se aplican compresas de aceite de Hipérico.
Otro antiguo remedio casero se obtiene de la siguiente manera: Se mezclan en partes iguales Consuelda mayor, Malvavisco, raíz de Helecho y flor de Saúco. 15 g. de esta mezcla se ponen a macerar durante la noche en medio litro de vino blanco. Al día siguiente se calienta hasta que rompa a hervir. Se baña el dedo durante dos horas en este vino tibio; después se pulveriza un trozo de tiza y con este polvo se cubre el dedo y se venda con un trapito.
LA PSORIASIS »incurable«
De todas partes de Austria y Alemania vienen a pedirme ayuda enfermos afectados de psoriasis, un mal que los médicos tienen por incurable. Nosotros que creemos en las virtudes de las hierbas medicinales de la botica del Señor, sabemos que entre la gran abundancia de plantas que se crían en los prados y bosques encontraremos un remedio adecuado.
Hay varias clases de esta enfermedad atormentadora: la así llamada psoriasis roja que se manifiesta en forma de manchas purpúreas circunscritas, otra que cubre la piel a modo de escamas y la tercera que engrosa la piel a modo de cuero llenándola de grietas, las cuales se profundizan hacia la noche hasta que se abren, causando así al enfermo dolores insoportables. Además se presentan terribles picores que suponen una carga para los nervios de cada paciente. De la piel se sueltan cada día a cada movimiento montones de escamas.
Hace años me contaron el caso de una mujer de 38 años que tenía toda la piel, desde el cuello hacia abajo, corácea y agrietada y se le había caído todo el pelo de la cabeza. Su vida era un calvario sin fin. En el hospital trataban de aliviar sus dolores metiéndola hasta el cuello en un saco de nylón; así la piel se ablandecía un poco y dolía menos. Pero no conseguían curar el mal. En aquel tiempo yo ya estaba convencida de que tal enfermedad sólo se podía curar mediante una dieta y hierbas purificantes y desintoxicantes. Cuando empezó a tomar la mezcla de tisana y la dieta que le recomendé, la mujer mejoró y en medio año se manifestó el éxito. En ese breve tiempo había recobrado la cabellera y la piel estaba lisa y sin manchas. Desde entonces he podido ayudar a muchos que padecían de psoriasis. Esta enfermedad se debe a un trastorno del hígado. Por eso, aparte del tratamiento con hierbas, se debe seguir una dieta rigurosa: hay que evitar los embutidos (menos los dietéticos), la carne de cerdo y el jamón, así como las sopas preparadas con estas carnes, toda clase de ácidos como vinagre, sidra, vino, limones, naranjas, toronjas, la fruta de bayas y sus jugos, incluso las grosellas negras, manzanas crudas, café, chocolate, cacao y miel de abeja ya que ésta produce ácidos que hacen daño al hígado enfermo. Además hay que abstenerse de pescado en conserva o ahumado, carne de lata, legumbres secas como guisantes, judías y lentejas y de toda clase de bebidas alcohólicas.
Se puede tomar leche y sus derivados, así como comidas preparadas con leche, carne ligera como la de ternera y de pollo, carne de vaca hervida, venado, pescado fresco o congelado, verdura ligera y cada día, en vez de fruta fresca, mucha compota de manzana.
Mezcla de hierbas
|
10 g. de corteza de Roble
30 g. de corteza de Sauce
40 g. de Ulmaria
20 g. de Fumarla
20 g. de conchos de Nuez
|
30 g. de Celidonia
50 g. de Ortiga
30 g. de Verónica
30 g. de Maravilla
20 g. de Milenrama
|
Todas las hierbas se mezclan bien y se toma por taza una cucharadita colmada de la mezcla que se escalda y se deja reposar tres minutos. Siempre que sea posible utilícese las hierbas frescas. De esta infusión se bebe a lo largo del día 1 — 2 litros a sorbos espaciados. Cada trago es absorbido y transformado inmediatamente por el organismo.
La piel se debe untar dos veces al día con manteca de cerdo (de los intestinos). Si se trata de psoriasis costrosa que se extiende sobre todo el cuerpo, hay que preparar una pomada con el jugo fresco de Celidonia que se obtiene mediante una licuadora. Por cada 5 g. de jugo se toma 50 g. de manteca de cerdo (de los intestinos), que se mezcla bien y se guarda en la nervera. También se puede utilizar pomada de Malva que se prepara del mismo modo.
Aparte se recomiendan baños con un cocimiento de Hierba de San Roberto. Los baños completos de Malva y Cola de caballo también alivian los picores y contribuyen a la curación. Se preparan mezclando las hierbas en partes iguales y dejándolas en maceración con agua fría durante la noche; 200 g. por cada baño: 20 minutos de duración; el corazón no debe estar cubierto por el agua del baño. — Todos estos tratamientos ayudan también a curar la neurodermitis.
Dos niños de una familia tenían psoriasis. La niña de 12 años tenía la enfermedad desde la edad de dos años; el niño padecía desde hacía nueve meses de este mal. Los padres hicieron todo lo posible; con la niña habían consultado a muchos médicos, fueron incluso a Suiza, pero no se mejoró. Con las hierbas que los niños mismos recolectaron con gran afán durante el verano pudieron liberarse de esta enfermedad. La madre contó que la niña tenía ahora la piel tan lisa como un bebé. Todavía sigue bebiendo la infusión en cantidades menores.
En otro caso una niña de 12 años tenía desde la edad de dos años toda la cara desfigurada por las manchas rojas de la psoriasis. Los padres estaban desesperados y también hicieron todo por liberar a su hija de ese mal. Después de seguir durante 4 meses mis consejos contra la psoriasis volví a ver a la niña y ya tenía la piel de la cara normal.
Una comerciante de un pueblo de Alta Austria tenía en muchas partes del cuerpo manchas rojas de psoriasis. Le recomendé el tratamiento arriba indicado y al mes ya se pudieron ver los buenos resultados. Las manchas rojas desaparecieron poco a poco. Lo mismo sucedió a un molinero cerca de Maguncia: en poco tiempo se le quitaron con este tratamiento las manchas rojas.
Una monja que había sufrido 30 años de psoriasis, empezó a principios de octubre con la cura de infusión y la dieta. En Navidad me comunicó que la enfermedad se había curado.
En octubre de 1972 me enteré de que una joven mujer, madre de tres hijos, padecía de esta terrible enfermedad. La tuvo después de una ictericia por lo cual sospeché que la enfermedad venía de un trastorno del hígado. La mujer tenía toda la piel cubierta de escamas, incluso el cuero cabelludo.
El pelo se le había ido cayendo y llevaba una peluca para salir de casa. Cada movimiento que hacía provocaba una lluvia de escamas. Por la noche la piel empezaba a trabajar y se formaban grietas profundas. La mujer que durante el día ayudaba a su marido en su trabajo de tapicero y después solía coser hasta medianoche para sus hijos, empeoró de tal manera que a las ocho de la noche ya no podía mantenerse en pie y tenía que acostarse. Se untaba el cuerpo con aceite y se envolvia con una sábana. Estuvo unas cuantas veces durante varias semanas en el hospital. Lo único que le hicieron allí para aliviarla un poco, fue meterla hasta el cuello en un saco de nylón bien atado para que sudara y se ablandara la piel. Finalmente se curó completamente en medio año al tomar la infusión de hierbas purificantes de la sangre y seguir la dieta indicada. En diciembre del mismo año ya no tenía aquel agotamiento y cansancio. Antes de Pascua del próximo año tenía la piel lisa y una hermosa cabellera. Una carta de Munich: »En septiembre de 1977 le pedí un consejo para curar a nuestro hijo Martín que entonces tenía 13 años. Según los médicos tenía neurodermitis. Trece años habíamos estado consultando un pediatra después de otro, clínicas dermatológicas y médicos naturistas pero todo fue en vano. Los médicos siempre le administraban cortisona. A los siente años estuvo dos meses en Davos. Allí el médico nos declaró que el niño sufría esta esfermedad ya en su nacimiento y que no tenía curación. Cada ataque se tenía que combatir con cortisona. Lo que siguió en las semanas y años después de aquella cura en Davos fué terrible: continuos ataques de fiebre, purulencias en las plantas de los pies hasta los tobillos, las palmas de las manos llenas de pus, heridas abiertas en las corvas, en el cuello y la cara e incluso en los lóbulos. Lo peor eran los picores que no cesaban y los dolores insoportables al andar que le causaban las glándulas inguinales tan hinchadas que parecían huevos de paloma. En septiembre de 1972 se puso tan mal que tuvimos que llevarlo al hospital de Schwabing. Los médicos hablaban de una sepsís de la piel. Después de un tratamiento intensivo con cortisona, el niño tuvo una apendicitis purulenta. Entonces el médico nos dijo: ,Pueden estar contentos de que fue el apéndice; otros niños cogen después de este tratamiento úlceras de estómago'.
A Martín se le presentaron nuevamente erupciones que según pruebas de laboratorio provenían de hierbas, polen, pelos, hongos y varias clases de polvo. Entre febrero de 1973 y julio de 1978 lo desensibilizaron, pero no se mejoró. Desde septiembre de 1977 Martín está tomando cada día, según su buen consejo, un litro y medio de infusión contra la psoriasis, sobre la cual usted escribe en su folleto. Al principio bebía la infusión a disgusto, lo que no nos extrañaba, ya que había probado tantas cosas en vano. Había perdido la esperanza. Su primera reacción después de tomar la tisana fue: ,Mamá, ahora orino siempre mucho.' A los 15 días cuando entré en su habitación para despertarle me dijo: 'Mamá, anoche me dormí apenas me acosté.' El ir a la cama para Martín siempre, ya desde bebé, había sido una pesadilla. Todo le picaba y se rascaba, no podía dormirse, estaba horas y a veces la mitad de la noche despierto. Desde aquel día que se durmió enseguida, Martín estaba convencido de que la infusión le hacía buen efecto y hacía todo por vaciar la botella que le preparaba. Ahora la piel ha mejorado considerablemente. De vez en cuando aún se rasca, pero desde que toma la infusión no ha tenido ninguna infección. A veces no lo podemos creer. Desde enero de 1978 no tiene que llevar vendas ni guantes de hilo. Martín va ahora a un colegio superior. El año escolar de 1977/78 fué para él el primero sin tener que ausentarse por su enfermedad durante semanas o meses. Usted no se puede imaginar, cómo progresa este año. Desde septiembre de 1978, después de cuatro años, toma otra vez parte en las clases de deporte y está contentísimo. En julio concluyó la desensibilización. Los médicos del hospital no se explican cómo ha mejorado tanto la piel del chico.«
En verano de 1979 vino a verme un médico especialista de la RFA con su hijo de 21 años, que padecía desde su nacimiento de neurodermitis. La vida del joven había sido un martirio continuo. Al principio del tratamiento con hierbas frescas tuvo reacciones violentas, como nariz tapada y presión en la cabeza. Los baños de Cola de caballo le sentaban bien, los de Hierba de San Roberto menos, aunque ejercían un efecto favorable sobre la piel. Contra la piel seca, utilizaba una pomada de Hamamelis mezclada con jugo fresco de Malva, la cual le hacía mucho bien.
En este caso también ha ido mejorando el enfermo. Sobre todo está seguro de que se curará completamente. A mitades de octubre 1979 ha vuelto a emprender sus estudios de Derecho.
RIÑONES: ARENILLAS Y CALCULOS RENALES
En esto caso se recomienda la esencia de Ortiga que se utiliza en la homeopatía; se toma diluida en agua. Esta esencia la venden en las farmacias, tiendas dietéticas y droguerías. El modo de empleo está indicado en la botella.
Según el capítulo sobre Cola de caballo, los baños de asiento con esta hierba, bebiendo simultáneamente infusión de Cola de caballo caliente, eliminan rápidamente las arenillas renales y vesicales y las piedras renales. En viejos herbarios dicen que con Hierba de San Roberto, Violeta olorosa y Gayuba también se eliminan con rapidez las piedras renales. Hay personas a las que no les sienta bien la Gayuba por su alto contenido en tanino. Les provoca vómitos, mareos e inapetencia. Por eso se puede tomar en vez de Gayuba, hojas de Peral borde que tienen el mismo efecto en el caso de cálculos renales. — La Agrimonia con sus flores amarillas que florecen de junio a septiembre a modo de espigas doradas en los bordes de los caminos, en los linderos de los bosques y en los ribazos, así como a orillas de los cultivos, en los matorrales y en las ruinas, se utiliza para preparar una infusión excelente contra las arenillas y los cálculos renales. Una mezcla de Agrimonia, Gatuña, Pan y quesillo y hoja de Abedul, 20 g. de cada hierba, son un remedio extraordinario. Las hierbas se escaldan y se deja reposar la tisana un minuto.
SUDORES NOCTURNOS
Un buen remedio casero contra los sudores nocturnos lo constituye la Salvia, una hierba de gran prestigio desde tiempos remotos. Se prepara una infusión que se bebe por la mañana en ayunas durante un cierto período. La planta elimina del cuerpo las sustancias que causan los sudores nocturnos. La siguiente mezcla de tisana recomendada en antiguos herbarios, es un remedio probado contra este mal: Salvia, Pie de león y Cola de caballo, mezcladas en partes iguales (20 g. de cada hierba). Se escalda y se deja reposar un poco. Durante una temporada se bebe por la mañana, antes del desayuno, una taza. Las hierbas fortalecen todo el organismo y eliminan así los sudores nocturnos. Cuando estuve la última vez, como todos los años, en un balneario sometida a una cura de baños de Kneipp, una señora mayor me contó que sudaba mucho por la noche y me preguntó si yo sabía algún remedio. Le aconsejé que tomara cada día antes de acostarse una taza de infusión de Salvia. Unos días más tarde nos encontramos durante un paseo. Dijo que era increíble, que después de haber tomado durante cuatro días la infusión de Salvia ya no sudaba por la noche. Le contesté sonriendo: »¡ Me parece que ahora sí estará convencida de lo rápido que ayudan las hierbas!«
SUEÑO INTRANQUILO (en niños)
Cuando los niños tienen un sueño agitado y dan vueltas de un lado para otro, entonces ayuda instantáneamente un baño con flor de Tila, a menos que el lugar donde se encuentra la cama del niño no esté bajo la influencia de irradiaciones nefastas. Se llena un cubo grande hasta la mitad de flores de Tila y se dejan en maceración con agua fría durante la noche. Al día siguiente se calienta todo y se mezcla el líquido con el agua del baño. Duración del baño: 20 minutos. Este baño se puede utilizar dos veces más. Hay que procurar coger las flores cuando el sol esté en lo alto.
TEMBLOR DE LOS MIEMBROS
Para combatir ese mal se toman 50 g. de Hipérico, 20 g. de Satirión, 20 g. de Primavera y 10 g. de gálbulos de Enebro y se deja todo 15 días en maceración en un aguardiente de 38-40° al sol o cerca de la lumbre. De esta tintura se toma cada hora de 15 a 20 gotas diluidas en la mezcla de tisana indicada a continuación. De la tisana se toman tres tazas diarias; por cada taza se emplea una cucharadita colmada de hierba. Mezcla de tisana: hojas de Fresno, flores de Hipérico, Milenrama, Salvia y Cola de caballo, 20 g. de cada hierba y todo bien mezclado. Además se hacen baños de asiento de yemas frescas de Abeto, Hipérico, Milenrama o Serpol. Por cada baño se toman 100 g. de hierba. Conviene hacer tres baños cada 15 días ya que el uso externo de las hierbas apoya considerablemente el tratamiento (véase en Generalidades »Baños de asiento«).
UÑAS — inflamación de la raíz, lesiones
Contra la inflamación de la raíz se prepara una maceración de 50 g. de Malva. Se deja la hierba 24 horas en agua fría a remojo; antes de acostarse se calienta y se toman baños de pies o manos, de 20 minutos de duración. Estos baños se pueden utilizar dos o tres veces guardándolos en un lugar fresco. Después del baño se unta la uña inflamada con pomada de Maravilla y se aplican compresas de Hierbas Suecas. Las uñas frágiles o lesionadas se curan con jugo de Cebolla o jugo de Ranúnculo (ranunculus acer). La cebolla se parte por la mitad y con la parte jugosa se frotan a menudo las uñas. También se puede extraer el jugo de la cebolla.
El Ranúnculo, que se cría a orillas de bosques y praderas también es muy eficaz. Se parte el tallo gordo y con el jugo se untan varias veces las uñas. Pero hay que repetir este procedimiento durante un cierto período; solamente una vez no ayuda nada.
Apuntes del libro: Salud de la Botica del Señor de Maria Treben de Editorial Ennsthalec
MUERDAGO (viscum album)
¿Quién no conoce el maravilloso Muérdago, que clava su raíz en as ramas de los árboles de hoja caduca y en los pinos, viviendo a expensas de ellos? Esta planta parásita es una de las más prestigiosas entre nuestras hierbas medicinales. Forma un arbusto redondeado con hojas algo coriáceas de color verde amarillento y persistentes en invierno. Las bayas son blanquecinas y vidriosas y están rellenas de una pulpa pegajosa. Los pájaros distribuyen la semilla, o bien al limpiarse en las ramas lo que les queda pegado en el pico, o bien mediante sus excrementos. Sólo de este modo se disemina la planta, ya que la semilla no germina ni en el agua ni sembrándola en la tierra.
En la antiguedad el Muérdago gozaba de gran fama como planta curativa y mágica. Se le atribuían poderes misteriosos. Los druidas la tenían por planta sacra, por panacea que curaba todos los males. Estos sacerdotes de los antiguos celtas la cortaban ceremoniosamente con ayuda de cuchillos y podaderas de oro.
Los antiguos médicos la empleaban como un remedio eficaz y seguro contra la epilepsía. Esta virtud, conocida ya por nuestros antepasados, la reconoce también el doctor Bohn, discípulo del padre Kneipp, y recomienda el Muérdago para combatir las convulsiones crónicas y los trastornos histéricos.
Se recolectan las hojas y los tallos pequeños desde principios de octubre hasta mitades de diciembre y en los meses de marzo y abril. En los demás meses el Muérdago carece de poderes curativos. Para secarla se corta la hierba a pedacitos.
Las plantas con el mayor número de agentes activos son las que se crían sobre los robles y los álamos; pero también sirven las de los abetos, pinos y árboles frutales. Otro consejo para la recolección: En los meses de marzo y abril el Muérdago casi no tiene bayas, porque en invierno se las han comido las aves. Es la época más conveniente para coger la planta, ya que usted no tendrá la molestia de quitar las bayas.
Muchas veces me han preguntado por qué elogio tanto el Muérdago, siendo una planta venenosa. Pues no es así: las hojas y los tallos no son nada venenosos, pero las bayas, en uso interno, sí que lo son. Si se prepara con ellas una pomada (véase »Modos de preparación«) constituyen en uso externo un remedio eficaz contra las congelaciones (sabañones).
Una mujer tenía desde hacía años la nariz congelada. En invierno casi no se atrevía a salir de casa con la nariz morada. Su mal empeoraba de año en año. Yo le aconsejé que se aplicara a la nariz un emplasto con pomada de muérdago recién hecha y que la dejara actuar durante la noche. Aunque parezca mentira, tengo que afirmar que en pocos días se curó la nariz.
El Muérdago, como poderoso estimulante de la función de las glándulas, es un remedio excelente para activar el metabolismo. Al mismo tiempo ejerce tal influencia sobre el páncreas, que tomándolo regularmente en forma de cura combate la diabetes, la cual pierde su causa de origen. Sobre todo las personas que padecen de una enfermedad crónica del metabolismo deberían probar a tomar por lo menos durante medio año regularmente tisana (maceración) de Muérdago. Esta también actúa favorablemente contra el desequilibrio hormonal. En este caso hay que tomar dos tazas al día, una por la mañana y otra por la noche.
Contra la arterioesclerosis el Muérdago es un remedio de primer orden, muy apreciado y recomendado en la apoplejía; este mal a penas aparece en los que hayan bebido regularmente tisana de muérdago. En los casos en que ya se haya presentado un ataque de apoplejía, se bebe durante 6 semanas 3 tazas diarias, después durante 3 semanas 2 tazas y durante 2 semanas una taza de tisana de Muérdago. La primera taza se toma antes y después del desayuno, la segunda antes y después del almuerzo, la tercera antes y después de la cena, cada vez media taza.
Como hemostático se emplea el Muérdago para atajar las hemorragias nasales; en este caso se inhala tisana fría por la nariz. Contra las hemorragias pulmonares e intestinales (en tifus y disentería) se toma la tisana bebida.
El Muérdago se puede considerar como el mejor remedio para el corazón y la circulación de la sangre. En los graves trastornos de la circulación jamás se debe cesar en hacer hincapié sobre su empleo. Como el Muérdago contiene agentes que normalizan todas las funciones del organismo, sucede lo inimaginable, y es que baja la tensión alta de la sangre y sube la tensión baja. De este modo calma el corazón agitado y también activa las funciones de éste. Todos los trastornos debidos a la presión anormal de la sangre desaparecen, a saber, la congestión en la cabeza, los vértigos, el zumbido de oídos y los trastornos de la vista. El Muérdago previene simultáneamente todas las lesiones cardíacas, por lo que se puede considerar con razón como una ayuda indispensable contra toda clase de trastornos del corazón y de la circulación de la sangre. En los tiempos en que vivimos, en que al hombre se le exige tanto debido al »stress« al que está sometido, necesitamos más que nunca de estos reconstituyentes.
Por las cartas que recibo me entero de que muchas personas que padecían de hipertensión, graves trastornos de la circulación, abatimiento, trastornos del corazón, como aritmia cardíaca, vértigos y cansancio ante el trabajo, gracias al Muérdago han perdido en poco tiempo todos estos males. Dicen que se sienten bien y han recobrado las ganas de trabajar. Tres tazas diarias de esta tisana, conseguida mediante una maceración en frío, bebidas a sorbos distribuidos a lo largo del día, normalizarán también su corazón y su circulación de la sangre y contribuirán a que le rinda más su trabajo.
En todos casos conviene someterse una vez al año a una cura de 6 semanas a base de tisana de Muérdago: Se beben durante 3 semanas 3 tazas diarias, durante 2 semanas 2 tazas diarias y una semana 1 taza diaria. En esas seis semanas se recupera la circulación y la tensión de la sangre. Para mantener este estado, es aconsejable tomar durante un año cada mañana una taza de tisana de Muérdago.
Un molinero de la región de Maguncia sufría desde hacía muchos años de hipotensión; había días que le costaba mucho hacer su trabajo. Consultó a varios especialistas, no sólo en Alemania sino también en Suiza, pero todo fue en vano. Mis advertencias de que el Muérdago ayudaba en las alteraciones de la presión sanguínea le causaron escepticismo. No obstante quiso probarlo. Era abril y el Muérdago, que todavía conservaba sus virtudes curativas, se podía coger de los árboles. Unos meses después, en una conferencia que di en una pequeña ciudad austriaca, vi al molinero de Maguncia sentado en la primera fila; el hombre contó a los oyentes que su tensión tan baja se había normalizado del todo con el Muérdago.
Las mujeres también deberían utilizar el Muérdago. Una circulación de la sangre normalizada también hace desaparecer los trastornos de la matriz y de la menstruación, sobre todo las menstruaciones excesivas y las hemorragias post-parto. Para combatir las molestias causadas por la menopausia, como la taquicardia, la congestión, los bochornos y el ahogo se debería beber esta maceración durante unos años. Los trastornos se pierden del todo y una ya no tiene la sensación de estar en la menopausia.
El jugo fresco del Muérdago puede ayudar a eliminar la esterilidad de la mujer. Se lava bien la planta y antes de que se seque se pasa por la licuadora. Hay que tomar por la mañana (media hora antes del desayuno) y por la noche cada vez 25 gotas diluidas en un poco de agua. Estas gotas, en forma de tintura, las venden en la farmacia.
Hace poco leí en el periódico un informe de Londres según el cual tres grupos de investigadores, trabajando independientemente uno del otro, llegaron a la conclusión de que en un gran porcentaje de mujeres de más de 50 años aparece cáncer de mama cuando han sido tratadas durante un período prolongado con medicamentos contra la presión alta de la sangre. ¿Por qué arriesgarse tanto, teniendo nuestro excelente Muérdago?
Recientemente se utiliza el Muérdago en la medicina para prevenir y combatir el cáncer. Las experiencias demuestran continuamente el efecto depurativo y terapéutico de las hierbas curativas. —Sírvase de estos remedios, para recobrar y mantener su salud.
MODOS DE PREPARACIÓN
Maceración (tisana): La tisana de Muérdago sólo se prepara en frío. Una cucharadita colmada de hierba se pone a macerar en 1/4 I. de agua; a la mañana siguiente se calienta todo ligeramente y se cuela. Si se necesita más cantidad por día, se guarda la tisana en un termo previamente enjuagado en agua caliente o se calienta cada vez al baño de María.
Tintura: Las gotas de Muérdago se venden en la farmacia.
Jugo fresco: Hojas y tallos se lavan y antes de que se sequen se pasan por la licuadora.
Pomada: Las bayas frescas del Muérdago se mezclan con un poco de manteca de cerdo hasta que se forme una masa (contra las congelaciones; sólo en uso externo).
NOGAL (Juglans regia)
El Nogal florece en primavera antes de desarrollarse las hojas. Se recolectan las hojas frescas en junio y las nueces verdes a mitades de junio mientras todavía se puedan traspasar facilmente con un palillo; los conchos de las nueces verdes se cogen todavía verdes poco antes de la maduración, y los frutos en otoño.
La infusíon de las hojas es un remedio muy indicado contra los trastornos de la digestión, como el estreñimiento y la inapetencia; sirve asimismo para purificar la sangre. También da muy buenos resultados en la diabetes y contra la ictericia.
Los baños preparados con un cocimiento de hojas de Nogal son muy eficaces tanto contra todas las enfermedades escrofulosas y raquíticas, la osteoporosis y la hipertrofia ósea, así como en las uñas supurantes de los pies y de las manos.
Para combatir la costra de leche, la tiña y la sarna haga lavados con el cocimiento de las hojas verdes de Nogal y verá los buenos resultados que dan.
Estos lavados y baños ayudan también a curar el acné, las erupciones supurantes de la piel, el sudor excesivo de los pies y el flujo blanco. Contra la estomatitis ulcerosa y las afecciones de las encías, de la garganta y de la laringe se hacen enjuagues.
Un cocimiento concentrado de hojas de Nogal, mezclado con el agua del baño cura los sabañones. Este mismo cocimiento se utiliza para repetidos masajes del cuero cabelludo contra la masiva caída del cabello. Los piojos, que últimamente van apareciendo de nuevo, también se eliminan con este cocimiento concentrado.
Con las hojas frescas de Nogal se ahuyentan otros insectos molestos.
De las nueces verdes que se cogen antes del día de San Juan, es decir a mitades de junio, se prepara un aguardiente que limpia el estómago, el hígado y la sangre y combate la debilidad del estómago y la putrefacción intestinal. Además es un remedio excelente contra la sangre espesa.
MODOS DE PREPARACIÓN
Infusión: Una cucharadita repleta de hojas de Nogal trituradas se escaldan con 1/4 I. de agua hirviendo; se deja reposar un poco.
Baños y lavados: 100 g. de hojas para baños de cuerpo; una cucharadita colmada por cada 1/4 I. de agua para lavados (véase en Generalidades »Baños de cuerpo«). Para el cocimiento concentrado se toma la doble cantidad de hojas.
Aguardiente de nueces: Unas 20 nueces verdes se parten en 4 pedazos y se llena con ellos una botella de cuello ancho; se le echa un litro de aguardiente que tiene que sobrepasar las nueces en 2 ó 3 dedos. La botella se deja bien tapada de 2 a 4 semanas al sol o en un lugar cálido. Después se cuela y se guarda en una botella. Según se necesite se toma un cucharadita. — Un licor de nueces muy bueno se obtiene añadiendo a las nueces antes de la maceración 2 ó 3 clavos, un trozo de canela en ramo, una vaina de vainilla y la piel lavada de media naranja (exento de productos químicos). 500 g. de azúcar se hierven en 1/4 I. de agua y se mezcla todo con el aguardiente de nueces.
ORTIGA MAYOR (Urtica dioica)
Un médico dijo una vez en una conferencia de radio que la Ortiga era una de nuestras mejores plantas medicinales. Si la humanidad supiera lo eficaces que son sus virtudes curativas, no cultivaría otra cosa que Ortigas. Pero desgraciadamente lo saben muy pocos.
La Ortiga es medicamentosa desde la raíz, pasando por los tallos y las hojas, hasta la flor. En la antigüedad ya gozaba de gran prestigio. Albrecht Dürer (1471-1528) pintó un ángel que vuela hacia el trono del Altísimo con una rama de Ortiga en la mano. El sacerdote suizo Künzle señala en sus escritos que la Ortiga ya se habría extinguido si no fuera por el escozor que produce a quien la toca. Insectos y otros animales ya la hubieran hecho desaparecer. A una madre de siete hijos que padecía desde su último parto continuamente de eczemas, le aconsejé que bebiera infusión de Ortiga. En poco tiempo desapareció su mal y al mismo tiempo el dolor de cabeza que lo acompañaba. Como la Ortiga es un buen remedio contra la arenilla renal y urinaria, le dije a la mujer que siguiera tomando la infusión, ya que yo suponía que desde su último embarazo tenía los riñones trastornados. Las afecciones renales van frecuentemente acompañadas de agudos dolores de cabeza. Los eczemas se tienen que combatir por vía interna con hierbas que depuren la sangre, porque suelen ser de origen interno. Así que la mujer se liberó al poco tiempo tanto de sus eczemas como de los dolores de cabeza. La Ortiga es nuestra mejor planta para purificar la sangre y al mismo tiempo para activar su formación. Siendo un buen estimulante del páncreas, la infusión de Ortiga hace rebajar el azúcar en la sangre. Cura también enfermedades e inflamaciones de las vías urinarias así como la retención de orina. Como estimula la evacuación del vientre, esta planta es muy aconsejable para las curas primaverales de purificación.
Desde que conozco las cualidades terapéuticas de la Ortiga, he tomado la costumbre de hacer curas de tisana de 4 semanas, en primavera con los primeros retoños y en otoño, después de la segunda siega, cuando vuelven a salir los brotes. Suelo beber por la mañana en ayunas, media hora antes de desayunar, 1 taza, y durante el día voy bebiendo 2 ó 3 tazas a sorbos. La taza que tomo en ayunas también la bebo a traguitos para que haga más efecto. Después de una de estas curas me siento la mar de bien y cada vez tengo la sensación de poder abarcar tres veces más de lo corriente. Mi familia y yo no necesitamos desde hace años ningún medicamento, y me siento flexible y joven. Además la tisana de Ortiga sabe bastante bien. Se toma sin azúcar. Personas de gusto delicado pueden añadirle un poco de manzanilla o menta para darle más sabor. La medicina popular recomienda la Ortiga en forma de curas de tisana de varias semanas contra afecciones del hígado y de la bilis, enfermedades del bazo e incluso tumor del bazo, catarros del estómago y de las vías respiratorias, convulsiones y úlceras estomacales, úlceras intestinales y enfermedades del pulmón.
Para conservar todos los principios activos de la Ortiga, hay que procurar no hervirla. Como profiláctico se bebe sólo una taza por día durante todo el año. Así combate también las enfermedades por virus e infecciones de bacterias.
A partir de una cierta edad se presentan determinadas consecuencias por falta de hierro: cansancio y agotamiento. Uno se siente viejo y menos capaz. En este caso proporciona la Ortiga fresca, por su contenido en hierro, los mejores resultados. Nos ayuda a superar estos trances difíciles de la vida. Después de una cura de tisana de Ortiga se recupera uno relativamente pronto. Vuelven la energía y la voluntad de trabajar e incluso mejora el aspecto físico.
Un día vino a verme una mujer joven anémica que además padecía del estómago y de la hiel y tenía continuamente fuertes dolores de cabeza. Le recomendé la tisana de Ortiga. Al cabo de un tiempo me encontré con ella por casualidad. Llena de alegría me contó qué rápido le había ayudado la Ortiga. Desde entonces toda su familia utilizaba con admiración esta planta extraordinaria. La Ortiga también es un remedio contra la hidropesía por sus virtudes diuréticas. Como favorece la formación de la sangre ayuda en casos de clorosis, anemia y otras afecciones graves de la sangre. Junto con otras hierbas medicinales se emplea la Ortiga con mucho éxito para combatir la leucemia (véase pag. 92 bajo »Leucemia«). Quien padezca cualquier clase de alergia (p. ej. fiebre del heno) que tome durante una temporada tisana de Ortiga.
La Ortiga rebaja la propensión a resfriarse y cura enfermedades gotosas y reumáticas. Una señora que conocía, había estado durante tres años con ciática muy dolorosa bajo tratamiento médico. Después de tomar durante un año un total de 6 baños de cuerpo con 200 gramos de Ortiga, desaparecieron todos los dolores.
Hace algún tiempo conocí a una señora de unos 50 años, que por su escasez de cabello llevaba una peluca. De esta manera hubiera acabado pronto con el resto de su cabello. Yo le dije que se lavara la cabeza con un cocimiento de Ortiga fresca y además con uno de raíces de Ortiga. La mujer siguió mi consejo y de semana en semana se pudo ver cómo su cabello crecía y se restablecía.
Muy agradable y de gran provecho para todo tipo de cabello es el masaje con tintura de Ortigas, hecha de las raíces que se excavan en primavera u otoño, y muy fácil de preparar (Véase bajo Modos de preparación »Lavado de cabeza« y »Tintura de Ortigas«). Yo misma me froto cada día la cabeza (cuero cabelludo) con esta tintura y me la llevo incluso cuando voy de viaje o a conferencias. El buen resultado es visible: El cuero cabelludo está libre de caspa, el cabello crece en abundancia y es suave y brillante.
La Ortiga también se emplea con eficacia para curar vasoconstricciones. Muchas de las personas que padecen esa enfermedad podrían evitar la amputación de la pierna, si hicieran a tiempo pediluvios con raíces de Ortiga (Véase en Modos de preparación).
Cada calambre o espasmo, venga de donde sea, se debe a un trastorno de la circulación de la sangre. En estos casos se recomiendan baños y abluciones con cocimientos de Ortiga. Lo mismo vale en el caso especial de la vasoconstricción coronaria. El enfermo se inclina sobre la bañera y se lava con un cocimiento de Ortiga tibio la zona del corazón, dándose suaves masajes.
Una señora de Bavaria que tenía 51 años padecía desde hacía 28 años de una fístula y últimamente había empeorado considerablemente. El profesor que la examinó estaba en duda sobre el resultado de una operación, dado que la fístula se encontraba en la cara sobre el pómulo. En 1978 consultó esta infeliz mujer a un curandero, que sobre todo se mostró comprensivo. Le ordenó una alimentación a base de verdura y fruta cruda, un régimen de respiración curativa y psicocibernética. La mujer mejoró pero no se curó. En marzo de 1979 empezó a recolectar ella misma las primeras Ortigas y bebió cada día 3 tazas de infusión, mezclada cada una con una cucharadita de la tintura de Hierbas Suecas. El 28 de noviembre de 1979 me escribe: »Dentro de los siguientes 15 días se cicatrizó mi fístula de la mejilla y los dolores habían desaparecido por completo. Y así ha quedado todo hasta hoy«.
Me llena de alegría el hecho de que tanta gente haya podido comprobar con su propio cuerpo las virtudes medicinales de la Ortiga.
Por ejemplo me escribió hace poco una mujer diciendo que había tomado durante varios meses cada día tisana de Ortiga con el resultado que se le quitó toda clase de agotamiento y cansancio, a pesar de su duro trabajo cotidiano, y además desapareció un ojo de pollo lleno de pus, que le había causado dolores hasta el muslo, y que por estar recargada de trabajo no había podido curar; también desapareció una micosis de la uña (hongo) que hubiera tenido que dejarse operar pero nunca pudo decidirse. ¡ Para que se vea cómo cura la buena Ortiga, limpiando y reconstituyendo la sangre! No se debe cesar de llamar la atención sobre ella.
Otra mujer me escribió que la Ortiga la curó de un eczema que la había hecho sufrir muchos años. Cartas como éstas son rayos de esperanza en mi vida. Me demuestran que nuestras buenas hierbas medicinales no dejan nunca de ayudarnos, sea donde sea.
Una vez vino a verme un hombre de cierta edad, con lágrimas en los ojos. Me contó que hacía tres años cogió una gripe y desde entonces tenía la orina de color marrón oscuro y sufría de dolores de cabeza insoportables. La cantidad de tabletas que tomaba así como las inyecciones que le daban últimamente para la cabeza no le ayudaban. Al contrario, el dolor de cabeza había aumentado de tal manera que el hombre estaba a punto de suicidarse. Yo le di ánimo y le aconsejé que tomara tisana de Ortiga recién cogida — 2 litros y medio a lo largo de todo el día. Al cabo de cuatro días me anunció por teléfono que los dolores de cabeza habían desaparecido por completo. Más tarde supe que después de la cura de Ortiga se encontraba mejor que antes de la gripe. ¡Aproveche usted también los primeros brotes de la Ortiga, sobre todo en la primavera, y haga con ellos una cura de depuración! Se quedará sorprendido de lo bien que le sentará.
Una monja de la orden de Santa Isabel siguió igualmente mis consejos y se admiró del buen resultado. Las manchas que tenía en la parte de la barriga y de los riñones, acompañadas de un fuerte picor, que no llegaban a curarse, se le quitaron al poco tiempo gracias a la tisana de Ortiga junto con una dieta para el hígado. En un caso parecido también ayudó rápidamente la tisana de Ortiga.
De una carta de Carintia cito las siguientes palabras: »Infinitas gracias por la ayuda inestimable que tuve por sus consejos. En los 19 años que duró mi enfermedad estuve en muchas clínicas neurológicas de toda Austria. Ningún médico pudo decirme lo que tenía, ni mucho menos ayudarme. He bebido durante una semana tisana de Ortiga y como por milagro ha desaparecido mi enfermedad como si jamás la hubiera tenido. ¡ Dios se lb pague!« Los hechos que acabo de presentar demuestran lo rápido
que pueden ayudar nuestras hierbas medicinales. Pero hay que tener en cuenta que en el caso de enfermedades graves no ayuda una sola taza diaria, sino que hay que beber por lo menos 2 litros, a sorbos, a lo largo del día.
Una comerciante me contó que cada vez que se iba de excursión o de viaje, incluidos los viajes de negocios, se llevaba un termo con tisana de Ortiga. Para ella es un remedio insustituible. No solo quita la sed, mejor que otra bebida, sino que refresca y combate el cansancio.
Otra indicación de interés: Contra los dolores de ciática, lumbago y neuritis de los miembros se emplean las Ortigas recién arrancadas, vivas, rozando con ellas suavemente las partes dolorosas. En el caso de ciática, por ejemplo, se sacude la planta fresca suavemente y despacio sobre la piel, empezando por el tobillo y siguiendo la parte exterior de la pierna hasta la cadera y desde allí pasando por la parte interior de la pierna hasta el talón del pie. Esto se repite dos veces y finalmente se da una pasada de la cadera hacia abajo y a través de las nalgas. En otras partes afectadas se procede de la misma manera. Al final se echan polvos de talco. -- ¿No tenemos que agradecerle al Señor el habernos dado una planta tan milagrosa? Hoy en día, todos van con prisas y no hacen caso de esta planta; prefieren tomar sedativos y esto en cantidades exageradas. Sin embargo, estas hierbas tan buenas, que han caído en olvido, son muchas veces el único remedio.
Finalmente quisiera añadir otra experiencia que tuve y que me impresionó mucho. En nuestra pequeña ciudad conocí a una señora mayor que me contó que el médico le había diagnosticado cáncer de estómago. A causa de su edad avanzada no se decidió a operarse. En esto, alguien le aconsejó que tomara tisana de Ortiga. Así que cada día iba a su huerto y cogía un puñado de Ortigas, que se criaban en gran cantidad a lo largo de la valla. Cuando después de algún tiempo fue a ver al médico, éste preguntó sorprendido: »¿Pero usted se ha operado? ¡Si no se ve ninguna cicatriz!» Las excrecencias cancerosas habían desaparecido del todo y la anciana pudo gozar de una vejez tranquila. Pero no es necesario que lleguemos hasta tal punto, porque nunca podrá formarse un tumor maligno si ingerimos en intervalos regulares los maravillosos poderes de nuestra Ortiga en forma de infusión.
Por último otro buen consejo: Empiece a partir de hoy con una cura de Ortiga. Las hierbas desecadas se venden en cada farmacia o herboristeria. ¡Que vuelvan las plantas medicinales a nuestras casas! ¡ Decídase! ¡ Cuando llegue la primavera póngase unos guantes, coja sus tijeras y salga a la divina naturaleza! Es una gran satisfacción coger uno mismo las Ortigas al aire libre. La experiencia ha demostrado que cuanto más frescas son las plantas, más eficacia tienen. No olvide de proveerse para el invierno: para este propósito debería cogerlas en mayo. ¡Alégrese de que sea capaz de hacer usted mismo algo por su salud!
Un lector alemán escribe: »Mi vecino utiliza la Ortiga para exterminar insectos y parásitos de su huerto. Mete una gran cantidad de Ortigas en un depósito de unos 300 litros con agua (naturalmente se puede hacer menos) y las deja bastante tiempo en remojo. Con esta agua de Ortigas riega repetidas veces sus plantas y así las mantiene libres de insectos sin tener que utilizar productos químicos. Incluso las zanahorias ya no tienen gusanos.« — Desgraciadamente hay algunos campesinos que sirviéndose de herbicidas han empezado a eliminar las Ortigas que se crían a orillas de bosques y praderas, lejos de carreteras y otros orígenes de contaminación. Los venenos peligrosos para el hombre llegan de este modo hasta los rincones más salvajes de los bosques. Ni siquiera piensan que con estos métodos matan también pájaros e insectos. Es una lástima que los campesinos no sigan cortando las Ortigas con sus guadañas. ¡Qué ciegos nos hemos vuelto!
MODOS DE PREPARACIÓN
Infusión: 1 cucharadita llena para 1/4 de litros de agua, sólo escaldar, dejar reposar brevemente.
Tintura: Las raíces, que se excavan en primavera o en otoño, se limpian con un cepillo, se trituran y se meten en una botella. Cubierto todo con aguardiente de 38-40° se deja 15 días al sol o cerca de una fuente de calor.
Baños de pies: Dos puñados de Ortigas frescas (tallos y hojas) y dos puñados de raíces bien limpias se ponen durante la noche en 5 litros de agua a remojo; al día siguiente se calienta todo hasta que rompa a hervir. Los pies se bañan sin sacar las plantas, y lo más caliente que se pueda soportar. Este baño se puede utilizar dos o tres veces, si se vuelve a calentar.
Lavado de cabeza: De 8 a 10 puñados de Ortigas frescas o desecadas se ponen en una olla con unos 5 litros de agua y se calienta todo a fuego lento. Cuando empiece a hervir se retira del fuego y se deja reposar 5 minutos. Si se emplean raíces, hay que poner dos puñados con agua fría a remojo, calentarlas al día siguiente hasta que comiencen a hervir y dejarlo reposar todo 10 minutos. ¡Utilice jabón duro!
Hierbas Suecas, 72gr. / o Gotas de Amargo Sueco*
Mezcla de hierbas basado en la receta original del Dr. Samst, elaborado en Austria. Hace más de 200 años el médico Sueco Claust Samst creo la combinación de hierbas curativas que hoy conocemos como amargo Sueco. Este elixir fue redescubierto por una herborista Austríaca llamada Maria Treben hace unos cincuenta años atrás.
Modo de preparación:
Estas hierbas se meten en una botella grande de cuello ancho, se llena con 1,5 litros de aguardiente (38-40°) se maceran durante 15 días al sol o cerca del calor.
Estas hierbas se meten en una botella grande de cuello ancho, se llena con 1,5 litros de aguardiente (38-40°) se maceran durante 15 días al sol o cerca del calor.
Se agita cada día; lo mismo se hace antes de colarlo y antes de cada uso. Primero se puede llenar sólo una botellita para el primer uso; el resto se guarda el tiempo que se quiera sin colarlo. Las Hierbas Suecas se guardan en botellitas bien tapadas en un lugar fresco. Así se conserva este elíxir durante muchos años. Cuanto más viejo se hace, más eficaz es.
Con “Original de Maria Treben” es un producto 100% natural, las hierbas están mezcladas con unas gotas de miel y posiblemente puedan estar pegadas, esto no influye en la alta calidad de este producto natural.
Con “Original de Maria Treben” es un producto 100% natural, las hierbas están mezcladas con unas gotas de miel y posiblemente puedan estar pegadas, esto no influye en la alta calidad de este producto natural.
Ingredientes:Vermut, mirra, azafrán, alcanfor natural, cúrcuma zedoaria, maná, carlina vulgar, angélica, regaliz, cáscaras de nueces, teriaca (contiene romero, salvia, raíz de angélica, jengibre, canela, nuez moscada, macis, clavel, miel.)
Elaborado por Maria Treben Naturprodukte GmbH, Kössen, Austria.
Distribuido en Espana y Portugal por VidaBliss-Productos naturales y ecológicos.www.vidabliss.com
Distribuido en Espana y Portugal por VidaBliss-Productos naturales y ecológicos.www.vidabliss.com
VidaBliss distribuye en exclusiva para la península ibérica las hierbas suecas
* Hierbas Suecas o Gotas de Amargo Sueco
El Dr. Samst, de padres y abuelos longevos, falleció a los 104 años. Fue un célebre médico y Decano de la Facultad de Medicina Suecia. La receta de este medicamento fue descubierta entre sus escritos después de su muerte y poco después, la herborista María Treben comenzó a recomendar con gran entusiasmo este remedio al haber experimentado personalmente la cura del tifus y otros padecimientos que la aquejaban. Ella popularizó esta excelente mezcla de hierbas medicinales a través de su libro “Salud de la Botica del Señor” hace más de 50 años atrás.
Pero el origen de las Hierbas Suecas se remonta al Siglo XVI y la receta de este elixir es atribuida a Paracelso, el gran reformador de la medicina. Consiste en una combinación cuidadosa de plantas y raíces medicinales, tales como Angélica, Carlina, Ruibarbo, Sen, Aloe y Genciana etc.
Pilar Moreno - Consultora Feng Shui Titulada, Reprogramacion Energética , Radionica y Terapeuta Medicina Natural
Visita las webs: www.institutogenshai.blogspot.com , www.fengshuioccidente.com y www.actiweb.es/terapiasyenergia
Enero 25, 2011 por joseppamies
Epilobium Parviflorum
Té Verde
Propiedades y beneficios
CÁNCER DE PROSTATA,
¿QUIMIOTERAPIA O EPILOBIO DE FLOR PEQUEÑA?
Epilobium Parviflorum
Enero 25, 2011 por joseppamies
Conocía los efectos adversos de los tratamientos convencionales de quimio y radioterapia comprobados en muchas personas que padecían cáncer de próstata, pero desconocía alternativas verdes que pudieran evitar sus sufrimientos.
Epilobium Parviflorum
Epilobium Parviflorum
Fue por casualidad que empecé a conocer personas con diabetes que a la vez tenían cáncer de próstata, que al tomar la planta Stevia para su diabetes, notaban un descenso de los niveles del indicador prostático PSA (antígeno prostático específico).
Algunos de ellos simplemente con la Stevia pudieron evitar operaciones y tratamientos químicos.
Otros sin embargo ya operados de próstata y con metástasis a otras zonas del cuerpo, lograron solucionar definitivamente su dolencia, según me han asegurado dos personas ya mayores, con infusiones de la planta “Epilobium Parviflorum” también conocida como Epilobio de flor pequeña.
Esta ratificación de este conocimiento me ha llegado cuando estaba leyendo un libro sencillo pero imprescindible de Maria Treben , llamado “Salud de la Botica del Señor”.
En él, Maria Treben, habla de experiencias de curaciones extraordinarias de esta planta con cáncer de próstata, vejiga urinaria y demás sistema urinario.
En el libro también nos comparte la solución para otras muchas enfermedades, utilizando plantas que tenemos a nuestro alcance en zonas denominadas continentales.
En algunos herbolarios se puede encontrar el Epilobio Parviflorum, pero para no depender continuamente de si se encuentra o no, la Dulce Revolución de las Plantas Medicinales http://www.dolcarevolucio.cat/es/ va a poner a disposición de todo aquel que la necesite, plantas de Epilobio para gozar por siempre de un seguro de vida casi gratuito en casa, ya que esta planta se establece de forma permanente donde se plante, resistiendo las heladas.
Las primeras plantas creemos que estarán disponibles para mayo-junio, pero lo mas útil es salir al campo y buscar en zonas frescas al lado de los ríos y encontrar uno mismo su planta.
Solo hace falta llevarse encima la foto del Epilobio y en verano-otoño se reconocerá fácilmente por sus flores y vainas que se abren llenas de semillas pegadas a unos finos filamentos que se desprenden de forma majestuosa de la vaina.
http://translate.googleusercontent.com/translate_c?hl=ca&ie=UTF-8&sl=de&tl=es&u=http://info.kopp-verlag.de/hintergruende/enthuellungen/jonathan-benson/prostatakrebs-mit-granatapfel-ekaempfen.html%3Bjsessionid%3D5D792A9DBE0C0C93519DAA61AA99A4AB&rurl=translate.google.com&twu=1&usg=ALkJrhjlkksUB4zVHKYhgv9CHwiVdGNvrQ ekaempfen.html%3Bjsessionid%3D5D792A9DBE0C0C93519DAA61AA99A4AB&rurl=translate.google.com&twu=1&usg=ALkJrhjlkksUB4zVHKYhgv9CHwiVdGNvrQ
Fuente >http://joseppamies.wordpress.co Té Verde
Propiedades y beneficios
El Te Verde ha sido a lo largo de la historia una de las terapias alternativas más utilizadas con el fin de mejorar y beneficiar la salud tanto física como mental. Fue descubierto en China hace más de 4000 años. Desde entonces ha sido utilizado no solo por cientos de médicos que prefieren sugerirles una medicina alternativa a sus pacientes, sino también por personas que aprovechan sus propiedades naturales para sanar y disminuir diferentes tipos de síntomas.
* Ayuda a no subir de peso
* Previene naturalmente las arrugas
* Estabiliza los niveles de colesterol en la sangre
* Previene y disminuye la calvicie
* Es un agente anti cancerígeno
El Te Verde es una de las opciones mejores para elimina líquidos del cuerpo. Este aspecto beneficioso puede deberse a las importantes propiedades antioxidantes del té verde. Su composición natural trabaja como diurético y laxante natural.
Podemos hacer que se retrasase el proceso de envejecimiento de nuestra piel, bebiendo una taza de té verde por día. El secreto son los potentes antioxidantes del té. Según especificó el Dr. Yasutake Tomata, de la Universidad Tohoku (Japón), el Te Verde sirve para retrasar y evitar el daño del ADN, enlenteciendo el desgaste de la piel con la edad.
El té verde es una buena alternativa si lo que se busca es disminuir la ingesta de medicamentos que en mucha ocasiones pueden generar una dependencia al organismo. Una taza de té al día nos ayudará a estar mejor.
El té verde ayuda a prevenir la calvicie, sin mencionar que ayuda a retrasarla considerablemente una vez que ya está avanzada. ¿Cuál es la razón? El té verde estimula la raíz del cabello gracias a sus catequinas, que generan una estimulación muy importante en los folículos. Se estima que para notar algún cambio es necesario beber entre tres y cuatro tazas de té por día, lo que serían unos 400 mg de catequinas aproximadamente.
Por supuesto es fundamental consumir un té de buena calidad.
Son muchos los profesionales que afirman que las propiedades de este producto natural ayudan a prevenir el desarrollo de las células malignas en el cuerpo, sin mencionar que también ayudan a mejorar notablemente el estado de pacientes con esta enfermedad .
La madre naturaleza nos ofrece muchos productos que contienen importantes agentes anti cancerígenos, sumamente importantes para nuestra salud.
Pilar Moreno - Consultora Feng Shui Titulada, Reprogramacion Energética , Radionica y Terapeuta Medicina Natural
Visita las webs: www.institutogenshai.blogspot.com , www.fengshuioccidente.com y www.actiweb.es/terapiasyenergia
LOS SECRETOS DE LAS PLANTAS SEGÚN PARACELSO
Pilar Moreno - Consultora Titulada en Feng Shui, Radiestesia, Radionica, y Terapeuta en Medicina Natural ( localización de Geopatias, Limpiezas Energéticas de espacios, Flores de Bach, Aromaterapia, Gemoterapia, , Péndulos y varillas , tratamientos para personas y animales )
ESTUDIOS E INFORMES DE PROSPERIDAD, ARMONÍA Y SALUD . PRESENCIALES Y SOBRE PLANOS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario